Alertas con los estrógenos

25 de mayo de 2022

No es secreto que las mujeres suelen ganar peso a medida que envejecen y que entre las causas se incluye la influencia de una hormona sexual: el estrógeno.

Investigaciones dirigidas a explorar esos efectos hormonales sobre el metabolismo en diferentes partes del cerebro, definieron los hallazgos que podrían conducir al desarrollo de terapias de reemplazo hormonal para combatir la obesidad o la infertilidad femenina sin aumentar el riesgo de padecer enfermedades cardíacas u oncológicas.

Cuando se acerca la menopausia, se aumenta peso en grasa y gastan menos energías. Al bajar los niveles de estrógeno, se es más susceptible a la obesidad y al síndrome metabólico.

Los expertos sospechaban que la influencia de la hormona en el metabolismo se debía a su acción sobre receptores en el cerebro. Al eliminar dichos receptores en el cerebro de ratones, aumentaron de peso, es decir, empezaron a consumir más calorías de las que quemaban. Fue demostrado que los ratones hembras que carecían de receptores de estrógenos a (ER) en una parte del cerebro (factor esteroidogénico hipotalámico-1 o neuronas SF-1) engordaban sin comer más. Dicha pérdida de ER en otra área del cerebro tuvo el efecto contrario: los animales comían más sin aumentar de peso. La pérdida de ER en esas zonas neuronales también dio lugar a varios problemas en la ovulación y la fertilidad.

Estos resultados sugieren que los fármacos desarrollados para actuar sobre los receptores de estrógeno en el cerebro podrían ofrecer una alternativa útil a las terapias de reemplazo hormonal que afectan a los receptores en todo el cuerpo.

Los científicos seguirán su estudio para aislar otros efectos relacionados con el estrógeno y los síntomas como sofocaciones premenopáusico.

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