Aceptarse a sí mismo
23 de enero de 2020
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No siempre las personas físicamente atractivas se imponen por su apariencia. Sin embargo, hay otras poco agraciadas, que provocan el comentario tan repetido: “no es bonita, pero… tiene “algo”. Y de esa forma marcan la diferencia, que no depende de la belleza, sino de ese “algo” llamado: carisma
Es conveniente tener la percepción de nuestras ventajas corporales. Cuando alguien se siente insatisfecho, refleja la discrepancia entre sus atributos y los esquemas sociales que, indudablemente, ha interiorizado. Craso error.
Compararse con ideales de perfección puede ser devastador, pues implica bajar la autoestima, e incluso, someterse a grandes sacrificios para acercarse a ese prototipo con dietas o… cirugías plásticas.
Resulta significativo que la imagen aceptable no tiene nada que ver con el estado de salud, físico o mental. Es más, en aras de lograr determinado estereotipo, algunas personas se exceden, como en los casos de la anorexia o el bronceado de la piel, asociado al envejecimiento prematuro y a mayor propensión al cáncer dermatológico.
Por cierto, siempre que hablan de la aspiración a la belleza, atribuyen el concepto a las mujeres, sin recordar que los hombres no escapan de tal interés. Ambos sexos se preocupan por lucir mejor. También hay que erradicar tabúes respecto a que las figuras obesas están en desventaja, sin referirse al sobrepeso como una enfermedad que debe combatirse, no por la apariencia, sino por ser un factor de riesgo para la salud.
Los psicólogos definen que “el atractivo físico es un esquema social establecido culturalmente que varía según patrones de estética y tendencias que dicta la moda, e influyen en las interrelaciones personales y juicios sobre la propia imagen corporal”. Sobre todo daña a quienes son más susceptibles a la comparación y a la influencia de los estereotipos. Por tanto, resulta imprescindible para la estabilidad mental, un ideal realista, fácil de alcanzar.
Una agradable apariencia influye en las relaciones humanas y en la psiquis individual. Ese factor está en la base de la autoestima y el condicionamiento es tal, que puede determinar la actitud ante la vida. Mencionemos algunos parámetros:
-Los conceptos de belleza física responden a intereses consumistas, más que a la salud y bienestar.
-Un modelo único para los dos sexos niega la diversidad y la especificidad en las distintas etapas de la vida.
-Hay que construir la imagen a partir de aceptar la imagen propia y mejorar los aspectos que le desagraden.
-La autoestima se define como la satisfacción de ser como somos.
-No subordinarse a las imposiciones de la moda. Tomar lo que resulte útil para renovar.
-No olvide, que tan importante es, más que gustar a los demás, aceptarse a sí mismo.
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