Niños-guías del patrimonio
3 de agosto de 2014
| |Durante todo el mes de julio, con una frecuencia semanal, se desarrolló en la Habana Vieja el taller de verano Niños-guías del patrimonio, como parte del programa Rutas y Andares para descubrir en Familia que organiza desde 2001 la Oficina del Historiador de La Habana. En esta ocasión, más de una veintena de pequeños interesados en combinar diversión con aprendizaje durante sus vacaciones, se acercaron a los valores arquitectónicos e históricos de la parte más añeja de la capital y a las vías para transmitirlos a otras personas.
Precisamente, como culminación de la experiencia, presentaron a sus familias los conocimientos adquiridos, en un recorrido que comprendió la Plaza de la Catedral junto a las edificaciones que la rodean y la exposición transitoria “Juegos de siempre”, que acoge hasta finales de agosto el recién reabierto Museo de Arte Colonial. Con una seguridad y naturalidad que emocionaron a quienes los escucharon, estos pequeños demostraron que pueden ser excelentes comunicadores del patrimonio.
Carlos Fabián Mollinedo, por ejemplo, explicó a los familiares que “la Plaza de la Catedral durante los años 1600 y 1700 era conocida popularmente por los cubanos de la época como Plazuela de la Ciénaga. En este lugar se abastecían de agua las embarcaciones que venían por el litoral y se hacían las tareas relacionadas con el mar. Aquí se cosían las velas, se tejían las sogas, se reparaba la artillería y se hacía carpintería de gran tamaño”.
Por su parte, Daniela Moya comentó durante el recorrido que “la campana mayor de la Catedral se llama San Miguel, pesa siete toneladas y fue fundida en España; la menor lleva por nombre San Pedro, es de dos toneladas y fue hecha en Matanzas”. Otra curiosidad relacionada con esta emblemática institución religiosa fue mencionada por Carlos Javier Alfonso: “La Catedral albergó los restos de Cristóbal Colón mientras Cuba fue colonia de España, exactamente permanecieron en la edificación hasta 1898”.
Además, los nuevos guías compartieron anécdotas y datos históricos relacionados con el Callejón del Chorro y su importancia para el abastecimiento de agua de los pobladores de la villa San Cristóbal de La Habana en tiempos de la Zanja Real; así como las características de los inmuebles que rodean la plaza y que se conservan en la actualidad.
Una vez dentro del Museo de Arte Colonial, madres y padres disfrutaron de la muestra de juegos y juguetes populares, piezas que al decir de Rachel Alfonso fueron adquiridas recientemente por la institución o pertenecen a otros museos del Centro Histórico y se encuentran allí en calidad de préstamo.
Ubicada frente a la primera vitrina que encuentra el visitante al llegar a la exposición, Annia Millán presentó las marugas. Acerca de ellas dijo que eran juguetes confeccionados para los bebés. Las que aquí se enseñan, aclaró, “están hechas de plata nácar y marfil, y algunas de ellas además de marugas son silbatos al mismo tiempo”.
Sobre los soldaditos de plomo, piezas en mayor número dentro del conjunto, conocieron a través de la explicación de Enier Hernández quien destacó que “surgieron en la corte del gobernante francés Napoleón Bonaparte. Fueron creados para el entretenimiento Napoleón II, hijo del emperador. Luego el juguete se popularizó y comenzó a producirse industrialmente. Con el paso de los años fueron representados en este formato personajes que aquí pueden verse como Juana de Arco y Julio César”.
Feliz por haber escuchado a los niños hablar sobre estos temas que por lo general les son ajenos, María Elena Barba comentó a Habana Radio su cariño a la Habana Vieja y la importancia de que su hijo y el resto de los participantes se hayan acercado a esta parte de la historia. Apuntó, asimismo, la necesidad de que el próximo año la matrícula para el taller sea mucho más grande para que los conocimientos lleguen a un número mayor de pequeños.
Tras el éxito de la presentación en público, Ingrid Fernández –especialista del Programa infantil de la Dirección de Gestión Cultural de la Oficina del Historiador de La Habana y una de las coordinadoras de la experiencia– adelantó a nuestra emisora las perspectivas de que en próximas ediciones de Rutas y Andares se ofrezcan recorridos conducidos por estos nuevos guías del patrimonio. Agregó además, que se prevé la realización de prácticas similares durante el venidero curso escolar.
Niños-guías del patrimonio constituye, sin dudas, un innovador proyecto que dio sus primeros pasos y cosecha triunfos. No solo los participantes se han beneficiado con este taller, también la ciudad antigua ha ganado nuevos admiradores. La historia de estas edificaciones de vetustas paredes ahora les es más cercana. Han descubierto un mundo apasionante dentro de un universo cotidiano.
Galería de Imágenes
Comentarios
Entradas Relacionadas
“Ubicar a las personas en el centro de las políticas públicas”
21 de noviembre de 2024
Con el consenso de que todo proyecto debe tener en cuenta al ser humano transcurrió la segunda jornada del XX Encuentro Internacional sobre Gestión de Ciudades Patrimoniales
Continuar Leyendo >>Inauguran en el Centro Histórico habanero el XX Encuentro Internacional sobre Gestión de Ciudades Patri...
19 de noviembre de 2024
“Hablemos sobre el Plan de La Habana” es el tema medular de la edición número XX del Encuentro Internacional sobre Gestión de Ciudades Patrimoniales que se celebra en el centro histórico habanero del 19 al 22 de noviembre
Continuar Leyendo >>Contra viento y marea
18 de noviembre de 2024
En la mañana de este lunes fue inaugurada la Asamblea General de la Red de Historiadores y Conservadores de las Ciudades Patrimoniales de Cuba, en la sede del Plan Maestro de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana
Continuar Leyendo >>
Pudimos conocer el taller de verano Niños-guías del patrimonio desarrollado, como parte del Programa infantil de la Dirección de Gestión Cultural de la Oficina del Historiador de La Habana dentro del programa Rutas y Andares para descubrir en Familia que organiza desde 2001 la Oficina del Historiador de La Habana es muy interesante y se debe repetir el próximo año con una matrícula mayor como comentó una madre. Felicidades para los organizadores del taller y para la periodista por su interesante trabajo en esta página de Habana Radio.