¡A transportar! a la criolla

31 de marzo de 2015

Arqueología, Matanzas, Patrimonio

Por Jenny Hernández / Matanzas

Surgió entonces una tubería resistente al calor y de gran dureza. FOTO CORTESÍA OFICINA DEL CONSERVADOR.

La inventiva de los nacidos aquí, no solo resulta cosa del presente sino también del pasado, así lo demuestra el hallazgo arqueológico de una tubería rudimentaria de casi seis metros, confeccionada a partir de canecas de ginebra de los siglos XVIII y principios del XIX.
Las piezas, ubicadas en el otrora ingenio San Gonzalo, en el municipio matancero de Unión de Reyes, fueron encontradas por el lugareño José Florentino Pérez, quien las conservó durante años sin conocer el grado de singularidad de las mismas.

Perforado el fondo de las botellas e insertadas una tras otra se dio forma al conducto que conectaba la casona del ingenio con  la periferia. Dicha alternativa para transportar fluidos resulta casi única dentro los reportes de la arqueología colonial cubana, asegura Leonel Pérez Orozco, Conservador de la Ciudad de Matanzas.
“Dicha práctica amerita investigación, incluso, por el  número de canecas de ginebra de los siglos XVIII y principios del XIX aparecidas, poco usuales en las excavaciones arqueológicas”, comentó.
La inventiva encontrada en el San Gonzalo alcanzó notoriedad gracias a la gestión de Roberto Boza, activista de la Oficina del Conservador, quien apunta que la última zafra de éste aconteció en 1911.