Ya Trump no es el favorito
5 de mayo de 2020
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Faltan meses para las elecciones presidenciales norteamericanas, aún los opositores demócratas no tienen su candidato oficial, pero las encuestas de medios partidarios de ambos bandos coinciden en señalar que el republicano Donald Trump tendrá dificultades para relegirse presidente en noviembre venidero.
El aspirante demócrata Joe Biden aseguró que Trump está buscando la forma para retrasar los comicios, independientemente de la pandemia del coronavirus Covid-19, por lo cual busca cualquier suceso a nivel nacional o internacional para hacerlo.
Al mismo tiempo, trata de elevar su figura, incluso colocándose como adalid ante la epidemia que ayudó a intensificar y extender con medidas que trataban de evitar la caída de la economía.
Cierto que Trump estaba en desventaja en las encuestas en la anterior elección presidencial, pero aprovechó hábilmente el descontento de los obreros en estados claves para imponerse a Hillary Clinton por la vía de los votos electorales, dominando en los estados claves, porque en los populares consiguió casi tres millones menos que su adversaria.
Sólo una encuestadora da favorito a Trump, al tiempo que asegura que el 52% delos electores de raza blanca son incondicionales a un mandatario que apoya por encima de todas las cosas a los supremacistas blancos, a las compañías que negociancon la salud y la educación y, sobre todo, las relacionadas con la industria armamentística, principal fuente de ingreso.
Otra cuestión que ayuda a BIden es que, al revés de lo que se esperaba, los principales candidatos demócratas han renunciado y apoyado a Biden, comenzando por el progresista Bernia Sanders, quien confesó que, además de ser amigo personal de Biden, éste incluirá en su agenda importantes puntos de su agenda.
“Compartimos un objetivo en común: derrotar a Donald Trump. Lo haremos juntos, vamos a unir a esta nación”, afirmó a su vez Biden, quien indicó que le gustaría una mujer en su fórmula, por lo cual se llegó pensar que será Michelle Obama, la esposa de Barack, de quien Biden fue su vicepresidente.
En un recentéprograma televisivo, el aspirante demócrata elogió la repuesta de Obama contra el ébola y criticó la gestión de Trump de la pandemia del coronavirus:
“El presidente tiene que ser honesto con la gente, necesita hacer caso a lo que dice la ciencia, necesita ser transparente con los ciudadanos estadounidenses”.
Asimismo, criticó la ruptura de Trump con acuerdos de todo tipo, especialmente el referente al cambio climático, por lo que prometió que invertirá 1,7 llenes de dólareseninvestigación en energíaslimpias y en la modernización dela infraestructura para eliminar las emisiones de gases de efectos invernaderos. Todo ello se pagará revirtiendo los excesos de los recortes de impuestos de Trump a las empresas, reduciendo los incentivos para los paraísos fiscales, la evasión y la subcontratación, asegurando que las empresas hagan un pago justo. .
De todas maneras, ya pesare de tener un buen programa y de estar primero en las encuestas, con Trump no se puede cantar victoria, porque detrás hay muchos intereses que le apoyan y, por ejemplo, no desean un programa de justicia social, igualitario, que revive ideas del temido Sanders.
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