Violencia y muerte cotidianas

23 de mayo de 2018

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Arsenio Rodríguez

 

Las noticias procedentes de México, en su mayoría referidas a violencia y muerte en esa nación, son cada vez más alarmantes y muestran lo que prácticamente es una epidemia sin posible solución, al extremo que luchar contra ellas forma parte de las agendas de los candidatos a las próximas elecciones presidenciales.
A mediados de mayo en el estado de Jalisco, en solo un fin de semana, murieron 14 personas en hechos vinculados con la delincuencia organizada, según reportó la Secretaría de Seguridad Pública. Los asesinatos ocurrieron en Guadalajara y tres municipios.
De acuerdo a los reportes, la mayoría de las víctimas murió por disparos y presentaban señales de tortura. Mientras tanto, en Oaxaca dos policías estatales fueron ultimados y su vehículo incendiado en un paraje del municipio San Miguel el Grande, según reportes de prensa.
Otras cinco personas también murieron en Zacatecas de forma violencia y tres más resultaron acribilladas a balazos, cuando se encontraban en una plaza de la ciudad de Morelia, Michoacán.
Así la lista se hace interminable, en Morelos y otras ciudades, lo que resumió un titular de un diario local al señalar: Violencia deja miles de desaparecidos del norte mexicano.
Prensa Latina precisa que en los últimos 12 años la violencia provocada por el narcotráfico y la guerra en su contra, dejó 15 mil 810 personas desaparecidas, según cifras dadas a conocer el 21 de mayo por la Procaduría General de la República.
A esto se le deben sumar las fosas clandestinas en Chihuahua, Baja California, Sonora, Tamaulipas, Nuevo León y Coahuila, destacándose Tamaulipas como el estado con más personas en paradero desconocido o extraviadas, un total de seis mil.
En mayo ocurrieron siete actos de sabotaje ferroviario contra una empresa en el estado de Veracruz, según informe de la Confederación de Cámaras Industriales lo que hace peligrar a la población que reside muy cerca de la línea férrea e, incluso, las posibles afectaciones al medio ambiente ya que por esa vía se transportan productos químicos de alta peligrosidad.
Solo al cierre de 2017 en esta nación se incrementó en un 27 por ciento en relación con el 2016 el número de homicidios intencionales superando los 30 mil, la cifra más alta desde que se informa hace 20 años por el Sistema Nacional de Seguridad Pública.
Es decir, según esas cifras, cada día fueron asesinadas 80 personas, precisando la Secretaría de Gobernación que la tasa de homicidios en el país el pasado año fue de 20,5 por ciento por cada 100 mil habitantes, en comparación con la tasa de 19,4 en 2011.
A pesar de las buenas intenciones de todos los candidatos a la presidencia en las próximas elecciones, muchos se preguntan si serán capaces, por lo menos, de lograr que sean menos las víctimas que la violencia ocasiona cada día en el país.