Verdades y mentiras a pulso
23 de noviembre de 2020
|
Estados Unidos superó el sábado el umbral de 12 millones de casos de coronavirus y más de 255 000 fallecidos, en momentos en que millones de estadunidenses se preparaban para viajar por el Día de Acción de Gracias, el próximo jueves, ignorando las advertencias de autoridades de salud que buscan impedir una mayor propagación de la enfermedad, según la agencia Reuters.
El propio sábado, el aún presidente de ese país, Donald Trump, abandonó la Cumbre virtual de las mayores economías del mundo (G-20), que tiene como punto principal de la agenda el enfrentamiento a la Covid-19 y se fue a jugar golf.
Antes, en una muy corta intervención ante jefes de estado y gobierno, apeló a su ego enfermizo y volvió con sus acostumbradas mentiras cuando «reivindicó su buena gestión para atender la pandemia» y resaltó el «avance económico logrado» en su país debido a su trabajo.
Aferrado a no abandonar el poder, trató de ignorar una realidad muy adversa, cuando en el estado de Pensilvania, la Justicia rechazó la demanda de Trump y su equipo de campaña de suspender la certificación del resultado electoral porque «carece de pruebas sólidas y fundamentos legales». El juez federal aseguró, además, que «no puede privar del derecho al voto a casi 7 millones de habitantes de ese estrado» como pretende el gobernante.
Después del duro revés en ese Estado, el presidente saliente enfrenta una mayor presión de sus correligionarios republicanos para que abandone su meta: revertir los resultados de las elecciones del 3 de noviembre y le llaman a reconocer su derrota ante el demócrata Joe Biden, recoge un informe de la citada agencia británica de noticias, publicado este domingo.
De acuerdo con Hispantv, hasta el momento, los intentos del equipo de Trump por impedir la certificación de los resultados no han tenido eco en los tribunales federales de los estados bisagra como Georgia, Míchigan y Arizona.
El senador republicano por Pensilvania, Pat Toomey, dijo que el fallo judicial cierra cualquier posibilidad de una victoria legal en este territorio y pidió a Trump que concediera de una vez las elecciones a Biden.
Además, Liz Cheney, congresista republicana por el distrito de Wyoming en la Cámara de Representantes, instó al magnate inmobiliario a respetar la voluntad del pueblo estadounidense.
En el propio entorno viciado que vive Estados Unidos y que causa incertidumbre en todo el mundo, el más fiel seguidor de la política de Trump, el secretario de estado Mike Pompeo, volvió a visitar y exhibirse por los territorios palestinos ocupados por Israel, en el Golán sirio y en un asentamiento ilegal en Cisjordania, precisamente en momentos que el gobierno sionista de Benjamín Netanyahu bombardea zonas pobladas palestinas.
En ese ambiente de desprecio hacia la humanidad, se vive en un país donde un presidente derrotado, ni siquiera respeta el voto electoral de casi 80 millones de sus conciudadanos que lo hicieron por Joe Biden.
Comentarios