Son muchos los muertos
26 de diciembre de 2017
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Veintitrés mil 101 muertos son muchos para este 2017, que aún no termina, y ya en México se establece un récord de carácter oficial de homicidios en un año, dejando atrás las cifras de poco más de 20 000 reconocidos en los años de Felipe Calderón, cuando se estableció una guerra directa con el narcotráfico.
Esto no tiene en cuenta la cifra exacta de las continuadas fosas comunes que se hallan a lo largo y ancho del país, además de la cacería hasta la muerte de unos cuatro centenares de indocumentados o personas ilegales que trataron de llegar a Estados Unidos.Ya van tres años en que los estados, Guerrero y Michoacán se encuentran en violenta efervescencia, ya que como en el anterior gobierno del Partido Revolucionario Institucional, el actual haya pactado con jefes mafiosos para la reducción de las protestas políticas.
Se habló de un aumento del Producto Interno Bruto, pero haymás desempleo, así como secuestros y extorsiones.
En este gobierno de Peña Nieto, los homicidios por el narcotráfico siguen prácticamente igual que con el de Felipe Calderón; no se le ha dado a nadie de comer con la Cruzada contra el Hambre, se reprime a quienes protestan por la desaparición de miles de personas, entre ellas los 43 estudiantes de magisterio de Ayotzinapa, y se trata de que la prensa no divulgue mucho los levantamientos en armas de grupos de autodefensas ante el incremento de la seguridad en varios estados.
A los periodistas que tratan de atacar lo mal hecho, la connivencia entre autoridades y mafiosos, por ejemplo, se les asesina, y México sigueocupando un lugar cimero en este triste y bochornoso renglón.
La pobreza alcanza a casi 55 millones de mexicanos, se sigue protestando contra la reformaeducativa y la izquierda mexicana, aunque dividida, como en la mayor parte del continente, ha logrado levantar su voz para denunciarlasmedidas neoliberales del gobierno que, con la complicidad de ministros y legisladores, entrega las principales riquezas a consorcios internacionales y la oligarquía local.
La principal riqueza del país, la petrolera, se la está entregando al sector privado, porque trata de convencer de que la transformación de Petróleos Mexicanos (PEMEX) requiere de las compañías petroleras extranjeras para la refinación y el desarrollo de la industria de la petroquímica, y, aunque ha pasado un largo tiempo,no toca el cáncer de PEMEX: la corrupción.
“Peña Nieto no ha tenido el valor de encarcelar al corrupto senador y líder petrolero Carlos Romero Deschamps… a quien ha dejado en la impunidad, al igual que a los funcionarios corruptos de PEMEX…”. Denuncian dirigentes de izquierda, a quienes avalan investigaciones de periodistas que han resistido el soborno, algunos de los cuales ya fueron asesinados, algo frecuente en la hermana nación, donde son muchos los muertos.
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