Rajoy se puso “farruco”
15 de septiembre de 2017
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“Mientras sea presidente no va a celebrarse el referendo”, expresó cas con violencia Mariano Rajoy, esta vez para meter un poco de miedoa los empresarios catalanes reunidos en Barcelona, quienes no se atrevieron a chistar.
El mandatario ha amenazado con emplear las fuerzas represivas para evitar la cita sobre la independencia señalada para el primero de octubre, cuya campaña se inició este jueves 14, con la aquiescencia del Parlamento catalán, voluntad que fue anulada en las más altas instancias jurídicas de la nación, que no quieren la escisión de la principal región económica española.
Criticó especialmente el que los independentistas le presenten un ‘trágala’. “Se me dice desde aquí que negocie un referendo y no me dan más margen. Y quieren que solo negocie si el referéndum es tal día o tal otro. O que negocie el porcentaje de votos con el que surtiría efecto. Pero no puedo negociarlo. Además, se me dice que, si no lo acepto, me presentarán una Ley de Transitoriedad Jurídica. Y esa ley se pretende aprobar en un solo día, porque se ha reformado el reglamento del Parlamento para que se haga en un solo día. O sea, que alguien pretende liquidar en un día la Constitución española, liquidar el Estatuto, liquidar la unidad nacional, liquidar la soberanía nacional y sacar a Cataluña de Europa. Y todo eso en un día. Señoras y señores, por sorprendente y paradójico que parezca, esto es exactamente así. ¿Sinceramente creen que es normal? ¿A qué grado de radicalismo vamos a llegar? ¿Cómo es que dejan esto en manos de unos extremistas? ¿Les parece sensato y razonable?”.
Palabras al parecer sensatas y razonables, repetiríamos, pero que significan que para él no existe el derecho a la autodeterminación, y en este contexto ya su Partido Popular se buscó el apoyo del también conservador Ciudadanos y de su “seguidor” socialdemócrata Partido Socialista Obrero Español, en tanto la izquierda, como de costumbre, se mantiene tambaleante e indecisa, razones por la cual Rajoy ha hecho y deshecho en los últimos seis años.
No obstante, Pablo Iglesias, líder de Podemos, criticó la actitud inflexible del Presidente, e indicó que se pudiera haber llegado a un referendo consensuado, político, lo cual coincidió con la opinión del presidente del Círculo de Economía de Barcelona, Juan José Brugera, quien le había advertido a Rajoy que “hay vías alternativas a la dualidad de blanco o negro. Resulta indiscutible que el llamado conflicto catalán es de raíz política y que solo se resolverá a través de la política”.
Le animó también a encontrar una solución desde esa vía política. Claro que también le pidió un compromiso claro contra la corrupción y, como se preveía, atacó el “punto flaco” de los “populares”, por lo cual el mandatario se dolió de que “hemos cambiado la presunción de inocencia por la presunción de culpabilidad”.
Pero justamente cuando daba por zanjada la cuestión del referendo, la sociedad civil catalana se reunió en Barcelona para dar una respuesta conjunta. Fue una ‘cumbre’ urgente de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), Ómnium Cultural y la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI). “Ganaremos el referendo con el voto mayoritario de la gente y, si hace falta, con una movilización popular sin precedentes, para que todo el mundo vea que es una realidad innegable”, afirmó Jordi Sánchez, presidente de la ANC. Jordi Cuixart, presidente de Òmnium, señaló al término de la cumbre que “No podemos esperar más”. Esta petición fue secundada por Neus Lloveras, para quien “la posibilidad del referendo pactado ha sido abortada definitivamente.
Los tres estuvieron de acuerdo en que se dejarán “la piel” en el convite electoral independentista, amenazado desde el exterior por Ángela Merkel, la canciller alemana, quien aseguró que la Unión Europea sabrá castigar el hecho y subrayó su apoyo a cualquier actitud que asuma Rajoy, incluyendo la más extrema.
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