Pillos y peleles intervencionistas
10 de febrero de 2019
|
Aspirando a la candidatura presidencial por el Partido Republicano, el más joven llamó “estafador” al actual mandatario, pero este, benévolo, sólo le dirigió una mirada de reproche, diciéndole “Marquito”.
Hoy, Marco Rubio es un abierto partidario de la reelección de Donald Trump, mientras el actual Presidente de Estados Unidos le consulta como “experto” en asuntos cubanos y se asesora en la campara imperialista para derrocar de cualquier manera al legítimo gobierno de Venezuela, y proclama abiertamente que “no permitiré una nueva Cuba”.
Ya siguió los consejos de Rubio de que apoyara abiertamente al pelele que se autoproclamó presidente de Venezuela, Juan Guaidó, lo cual fue respondido con la ruptura de relaciones diplomáticas y políticas por el legítimo gobierno de Venezuela.
Hay que recordar que el chavismo, de 16 elecciones, sólo perdió una, cuando la opositora Mesa Unitaria de Oposición (MUD) ganó las elecciones parlamentarias, pero, en realidad, las perdió, cuando adoptó la estrategia de no más disputas en las urnas, sino ataque directo y violento, con todas las mentiras y complicidades posibles, para desestabilizar y hacer caer al gobierno de Maduro.
Mientras, la justicia declaraba a ese parlamento en desacato, por su constante obstrucción y estar sus integrantes en plena labor contrarrevolucionaria, conociendo que cuanto más tiempo pasa, más difícil se les hace recuperar los privilegios y monopolios perdidos.
De ahí el llamado a la invasión militar por Estados Unidos, antecedida de una hipócrita ayuda humanitaria, porque persigue el bloqueo general, con una guerra económica que se mantiene, y el congelamiento de los legítimos fondos venezolanos en el propio Estados Unidos y bancos de Europa, principalmente en Gran Bretaña y Suiza.
Este es el marco antidemocrático en el que se mueven los enemigos de la Revolución Bolivariana, y sólo desde él es posible entender que los medios de comunicación en manos de grupos poderosos se hayan unido para librar servilmente la batalla que les impone la defensa de esa falsa libertad que es manejada por los grupos de poder en Estados Unidos.
Asimismo, la oposición ha desoído hasta ahora el llamado al dialogo, en el marco de la acción intermediaria para buscar la paz, propugnada por los gobiernos de México y Uruguay.
A la balandronada de la Jefatura del Comando Sur de que está dispuesto a invadir Venezuela, el presidente Maduro advirtió que las fuerzas armadas y el pueblo resistirán cualquier agresión, y convocó a nuevas elecciones parlamentarias para superar la crisis de la autoproclamación de Guaidó, quien, apuntó, no quiere comicios, sino la intervención militar norteamericana.
“La Asamblea Nacional Constituyente tiene en su agenda la atribución constitucional, histórica y política para llamar a un adelanto de elecciones parlamentarias este mismo año. Yo estoy de acuerdo, que se relegitime el Poder Legislativo del país y vayamos a unas elecciones libres con garantías, que el pueblo decida por una nueva Asamblea Nacional”, dijo el Jefe de Estado.
Maduro explicó que la propuesta ha sido debatida en lo interno de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC): “Yo estoy de acuerdo y me resteo con esa decisión. ¿Quieren elecciones? ¿Quieren adelanto de elecciones? Vamos a elecciones parlamentarias, pues”.
Comentarios