Nuevo Pacto Financiero Internacional: Ideas justas o desastre

12 de julio de 2023

|

Gustavo Robreño

 

Se hace cada día más evidente que para alcanzar y para acompañar al anhelado nuevo orden mundial que está asomando se hace necesario también un nuevo orden económico internacional semejante o muy parecido al que quedara plasmado en la Carta de los Derechos y Deberes Económicos de los Estados, aprobada por la Asamblea General de Naciones Unidas en la década de los setenta del pasado siglo y lanzada al cesto del olvido, donde yace desde entonces enterrada por el neoliberalismo y el capitalismo salvaje que la “escuela de Chicago” y las potencias capitalistas intentaron imponer al mundo, consagrando así sus supuestos derechos de explotación y saqueo.
La situación ha llegado a extremos tales que hoy todos buscan -o dicen buscar-, una salida al atolladero económico en que han sumido al mundo los mismos que decían salvarlo, a la vez que buscan una salida, siquiera mínima, a las convulsiones sociales que se suceden aún en el mundo desarrollado que dicen representar y mostraron antes como “sociedades felilces”.
El gobierno francés ha lanzado la iniciativa de un nuevo Pacto Financiero Internacional y los países en vías de desarrollo sostienen la necesidad de reformar la actual arquitectura financiera mundial que la ahoga e impide un desarrollo verdadero e integral. El esquema vigente las convierte eternamente en fuente de materias primas y mano de obra barata hasta la mendicidad, añadido un intercambio comercial injusto y desigual.
La desintegración de la URSS y el campo socialista europeo, que eran alternativas para rehuir tal situación de inequidad e injusticia, vino a colmar las desgracias del mundo en vías de desarrollo y los condenó a una etapa de indefensión y desgracia de la cual están emergiendo hoy.
Hay ya un conjunto de países importantes que marchan a la vanguardia de los cambios esenciales que debe enfrentar el capitalismo salvaje y comienza a hablarse y a llevar a la práctica el uso de monedas nacionales en sustitución del dólar, mecanismo que el imperialismo de Estados Unidos utiliza como instrumento de dominación planetaria surgido tras la Segunda Guerra Mundial y los llamados “Acuerdos de Bretton Woods”.
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible propuestos por Naciones Unidas para 2030 se hayan en condiciones tales que su incumplimiento es considerado desde ahora como una realidad, tal como ocurre con las medidas relacionadas con el cambio climático, salidas de los acuerdos de París al respecto.
La reciente Cumbre para el logro de un nuevo pacto financiero internacional reflejó la gravedad de la situación actual y su degradación día por día, resaltando la urgencia de la situación, más allá de ideologías o políticas de corto plazo.
El Grupo de los 77 más China -que actualmente preside Cuba de manera Pro Tempore-, es la agrupación más representativa de los países en vías de desarrollo y planteó allí la urgencia de encarar y replantear las relaciones Norte-Sur antes de que sea demasiado tarde.