“Lucha contra el terrorismo”: manipulación y falacia
15 de abril de 2019
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Como señalamos en un comentario anterior, el tema de la supuesta “lucha contra el terrorismo” que dicen llevar a cabo el gobierno imperialista de Estados Unidos y algunos de sus socios tiene aún mucha tela por donde cortar y está lleno de dudas e interrogantes, de aristas misteriosas que arrojan serios cuestionamientos acerca de la sinceridad y transparencia de la citada “lucha” que proclaman.
No olvidar que la generalización y auge de tal situación tiene su origen más inmediato en las guerras de agresión e intervenciones militares lanzadas por los sucesivos gobiernos imperialistas de Estados Unidos y asociados de la OTAN contra Afganistán, Siria, Iraq y Libia, que en muy corto plazo encendieron la caldera del Medio Oriente en busca de ganancias geopolíticas y económicas, en violación flagrante de las leyes internacionales y de la vapuleada Carta de las Naciones Unidas.
Es muy extraño, además, que la “lucha contra el terrorismo” que dicen impulsar Estados Unidos y la OTAN, pase por alto al terrorismo de Estado que practica el estado sionista de Israel de manera constante, abierta y de lo cual se enorgullece cada día.
Todo lo anterior –visto en su conjunto– puede llevarnos a la conclusión nada festinada de que existen vínculos por ahora invisibles pero nada sorprendente entre las llamadas “potencias occidentales” que dicen combatirlos y los grupos terroristas que hoy mismo siguen asolando a naciones del Medio Oriente y África.
Hartament6e sospechosa es la impunidad de esos grupos y en especial su financiamiento, contra el cual no parece existir ningún tipo de persecución económica o bancaria como la que, por ejemplo, se aplica contra Venezuela.
La supuesta “lucha contra el terrorismo” de Estados Unidos y sus socios ha caído en el mayor desprestigio y se muestra claramente como un instrumento manipulador y falaz para encubrir los intereses del Imperio.
Una prueba evidente de los que aquí afirmamos es la declaración como “grupo terrorista” que ha hecho el gobierno de Estados Unidos respecto al Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica de Irán, institución formada por el pueblo iraní en armas para la defensa de su independencia y soberanía, reiteradamente amenazadas por el propio gobierno yanqui y comparsa.
No es difícil concluir que el terrorismo mercenario sirve al Imperio y al capital, nada tiene que ver con las legítimas y justas aspiraciones de los pueblos y es, por tanto, utilizado y manipulado.
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