La crisis política de Estados Unidos
2 de marzo de 2021
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La crisis política de Estados Unidos se profundiza y agrava cada día, mientras tampoco sw resuelven la grave crisis sanitaria y sus consecuencias económicas, prevaleciendo un ambiente de ingobernabilidad e incertidumbre qe la Administración Biden trata de solventar para que el país imperial pueda recuperar su curso normal.
La insólita y contradictoria absolución del megalomaníaco Donald Trump en el juicio político que por segunda vez se le siguió en el senado de la Unión -caso único en la larga historia de esa nación-, no ha hecho sino ahondar las fisuras por doquier, incluyendo la política exterior, donde la influencia del Imperio decrece y sus aliados se llenan de dudas e inquietud.
Tratando de dar una explicación a la dramática situación a que los ha llevado su enloquecido antecesor, el propio presidente John Biden ha formulado apreciaciones sin precedentes en boca de un mandatario estadounidense cuando dijo refiriéndose al proceso trumpista ventilado en el Congreso: “Este triste capítulo en nuestra historia nos
ha recordado que la democracia es frágil…Esa violencia y extremismo no tiene cabida en EE.UU. y cada uno de nosotros tiene el deber y la responsabilidad, como estadounidenses, como líderes, de defender la verdad y derrotar las mentiras”
El proceso contra Trump va dejando secuelas de todo tipo y la nación imperial se adentra en un período de ingobernabilidad y polarización que pueden amenazar al sistema mismo, un peligro ante el cual advierten voces más serenas como el líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch Mc Connell, un viejo zorro de la política a quien el ex mandatario ha cubierto dr insultos por no apoyarlo abiertamente.
El Partido Republicano es hoy una víctima del trumpismo, abocado a una profunda división que pudiera hacerlo desaparecer, según no pocos observadores de la realidad estadounidense, que comparan la situación actual con los días de Watergate en la década de los 70, a raíz del frustrado mandato del renunciante Nixon y de la derrota yanqui en
Viet Nam.
La extraña “absolución” de Trump y todos los procesos a los que fue sometido, en su conjunto, pusieron en evidencia como pocas veces la bancarrota moral del Imperio, varias crisis internas simultáneas, de las cuales trata de salir sin perder los poderes que otrora detentó sobre el mundo,
Pagan así el precio de haber tenido sentado en la Casa Blanca, aunque fueran solo cuatro años, a un sujeto irresponsable, ignorante e inmoral que ha puesto al país al borde de un abismo.
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