Hartazgo social hizo elegir a Javier Milei
21 de noviembre de 2023
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La desesperación de la mitad de la población que sufre hambre, la hiperinflación que alcanza casi el centenar y medio por ciento y el deterioro de una economía que es aún la segunda en Suramérica hicieron que la masa de desesperados argentinos votase ampliamente este domingo a favor del ultraderechista Javier Milei para que fuera su presidente en los próximos cuatro años.
No fue en sí una victoria para un economista sin experiencia política, que da zarpazos a diestra y siniestra, defender a Estados Unidos e Israel y de dar zarpazos contra China y Brasil, “porque tienen gobiernos de izquierda”, dice.
Es simple y llanamente que el peronismo no supo aprovechar su gobierno para ganar las simpatías del pueblo con una política firme frente a las secuelas negativas dejadas por el anterior gobierno de Mauricio Macri, quien endeudo a Argentina hasta el tuétano, enviando al exterior millones de dólares del préstamo sin precedentes del Fondo Monetario Internacional y presentándose ahora como una de las bazas que ayudó a Milei a ganar la Presidencia.
Pero el electorado argentino no tuvo en cuenta esto, porque la política económica gubernamental ha resultado fallida, con un ministro de Economía, Sergio Massa, candidato presidencial de Unión por la Patria, quien admitió antes del cómputo oficial su derrota, antes del cómputo oficial.
Faltó decisión, enfrentarse a los monopolios imperialistas y la oligarquía local. Asimismo, no huno una posición firme y consecuente ante el Fondo Monetario Internacional, aceitando virtualmente que dirigiera la economía del país, como hace siempre, rechazando apoyar a otros sectores del peronismo -como el kirchnerismo- que recomendaba el no pago al Fondo o pagar la deuda que dejo Macri con los más de 400 000 millones de dólares que los magnates han depositado en el exterior para eludir impuestos.
Ahora el país se aboca a un gobernó de ultraderecha que sumirá en el entrante diciembre y que tiene un programa neoliberal tan vasto que debe cubrir 35 años de gobernanza, aunque en estos momentos enfrenta minoritariamente a un Parlamento que pudiera obstaculizar algunas de sus pretensiones, aunque no nos llenamos a engaño, porque entre el loboso y las prebendas que este conlleva cualquier cosa puede suceder.
Veamos algunas de las propuestas de la campaña de Milei, recopiladas por The Associated Press, Microsoft Newa y el colega Cubas.
Entre las ideas que el ahora presidente ha promovido públicamente, destacan como los principales ejes la reforma económica, la competencia de monedas que podría culminar en una dolarización, la unificación del tipo de cambio, la reducción de gastos estatales y la privatización de empresas públicas.
En términos tributarios, las reformas contemplan la eliminación y baja de impuestos, así como las retenciones y derechos de exportación y todo tipo de aranceles de importación para insumos.
En el ámbito laboral, la flexibilización es central. Incluye el fin de las indemnizaciones y su sustitución por un seguro de desempleo con el objetivo de reducir los costos laborales para terminar con la informalidad.
En el plano de la salud, se generaliza el cobro de las prestaciones que actualmente recibe la población en forma gratuita o subsidiada. Y en la educación, el sistema de váuchers o cheques para distribuir los fondos a los padres de modo que se financie la demanda en lugar de la oferta, así como la eliminación de la obligatoriedad de la educación sexual integral.
Milei ya lo había advertido: la desregulación de tenencia de armas de fuego para los ciudadanos es una de las medidas que figuran en su plataforma electoral.
También se incluye la militarización de establecimientos penitenciarios “a fin de recomponer el sistema”.
Entre otros puntos de seguridad, se evalúa estudiar la baja de la edad de imputabilidad de los menores, prohibir el ingreso de extranjeros con antecedentes penales y la deportación inmediata de aquellos que cometan delitos en el país.
Polémico y provocativo, las declaraciones públicas de Milei agitaron la conversación pública. Él puso muchas propuestas sobre la mesa informalmente en reiteradas oportunidades, aunque en su plataforma brilla por su ausencia la que se refiere al libre comercio de órganos.
A esto también se refirió en la discusión de candidatos presidenciales televisada. “No proponemos la venta de órganos, decimos es que hay 7 000 personas esperando un trasplante y 300 000 potenciales donantes, hay algo que no funciona en el medio y que genera un montón de corrupción”, argumentó, aunque no explicitó cómo se resolvería esta problemática.
Por lo pronto, el anuncio de poner en práctica algunas medidas neoliberales en el inicio de su mandato, ya ha disparado las acciones de empresas argentinas en Wall Street.
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