Haciendo de todo contra Yemen

5 de marzo de 2018

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Arnaldo Alfonso Musa Pachá

 

Luego de tres años de bombardeos de la coalición liderada por Arabia Saudita y ahijada de Estados Unidos contra el pueblo yemenita, la resistencia popular se mantiene no obstante los más de 13 000 muertos, ocho millones de personas padeciendo hambruna y otros 13 millones en situación precaria, además de que subsisten en medio de una infraestructura destruida en un 75%.

Todo un caos que ahora se encuentra en un medio sorpresivo y hasta inusitado, en el que ejércitos regionales y tribales, financiados por las satrapías del Golfo, han invadido las más ricas zonas de Yemen, bajo el mando de los Emiratos Árabes Unidos (EAU).

Quizás pudiera parecer una contradicción entre los poderes saudita y emiratí, cuando conocemos que tropas de los EAU atacaron y ocuparon el importante puerto sudyemenita de Adén, luego de vencer a las fuerzas del presidente Hadi, quien siempre gozó del favor saudita, y que ahora está detenido en Riad.

Los EAU han dado a conocer a Naciones Unidas que permanecerán en Adén el tiempo que sea necesario, por lo que han ocupado un punto vital de la economía del país y muy estratégico para la navegación de los barcos que trasladan el petróleo entre distantes partes del mundo.

Pensamos que es una nueva táctica para desmembrar a la empobrecida nación, luego de que bombardeos invasiones preconizados por el Imperio no han podido quebrar la resistencia encabezada por los rebeldes hutíes, la mayoritaria, mejor armada y con mayor control de territorio entre las facciones de la resistencia.

 

Lo que hace el imperio

Estados Unidos y la coalición antiyemenita que lidera han saboteado y bloqueado la inmensa mayoría de los intentos por suministrar ayuda humanitaria a Yemen y, por el contrario, maniobran para condenar todo tipo de ayuda en su afán por extender su política antirrusa y antiiraní.

En este contexto, la política imperialista sufrió un fracaso en el Consejo de Seguridad, cuando Rusia vetó una resolución presentada por el Reino Unido, apoyada por EE.UU. y Francia, que culpaba a Teherán de suministrar armas a Yemen.

El presidente del Comité Supremo Revolucionario de Yemen, Mohamed Ala al-Houthi, aseguró que el veto ruso a la resolución antiiraní del Reino Unido constituye una derrota para las políticas de Estados Unidos y Arabia Saudita, así como para los ‘crímenes vergonzosos’ que cometen estos dos en el mundo.

Detrás de esto está la preocupación del Comando Central de Estados Unidos por el avance de los misiles balísticos iraníes, tanto en cantidad como en calidad.

Pero Irán está más motivado por la grave situación del pueblo yemenita, por lo cual ha demandado al Consejo de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas poner fin a la hipocresía, la distinción y los dobles raseros aplicados por ciertas potencias occidentales en tema de derechos humanos, e invita a todos a iniciar un diálogo integral para fortalecerlos.