De los asesinatos impunes: Carlos Muñiz Varela
5 de agosto de 2023
|
Mayra Montero, escritora cubana residente en Puerto Rico, así lo recuerda: “Cuando se encendió la luz en La Tertulia, luego de ver el documental aquella noche, la madre de Muñiz Varela se enjugaba las lágrimas con un pañuelito. Acababa de oír al autor intelectual del asesinato de su hijo, declarar que había sido ’un ajusticiamiento a destiempo, porque debieron matarlo cuando nació”.
Este 10 de agosto se hubiera celebrado el cumpleaños 70 de Carlos Muñiz Varela, asesinado a tiros a los 26 por el hecho de haber abierto en San Juan, la capital de la colonia estadounidense, la primera Agencia de viajes que facilitaría algo a los cubanos residentes allí visitar a sus familiares en Cuba.
Repito, por eso lo mataron. Sólo había fundado un negocio para facilitar los viajes a Cuba.
Confluyeron en su asesinato dos elementos básicos: una ultraderecha de origen cubano de vocación violenta demostrada en otros atentados y el derribo de aviones, y una policía siempre dominada por elementos mafiosos y escuadrones de la muerte.
No fue nada nuevo, ni ha durado poco, porque la corrupción y el crimen organizado ha permeado todos los poros del cuerpo policial.
En el documental exhibido en La Tertulia, “Recordando a Carlos”, se cuenta todo: quienes se confabularon, donde se reunieron, como lo atacaron de la manera más salvaje, en lasas calles de una urbanización, donde a esa hora paseaban adultos y jugaban niños.
En el relato fílmico, se rescata el fragmento de una entrevista que Luis Frasncscvo Ojeda le hiciera a Julio Labatut, sospechoso del crimen. Cuando Ojeda se refiere al asesinato de Muñiz Varela, Labatut lo interrumpe, y le dice que “No fue un asesinato” y a continuación pronuncia las palabras ya citadas anteriormente, y que vale la pena repetirlas: “Fue un ajusticiamiento a destiempo. Y digo a destiempo, porque lo mataron a los 26. Debieron haberlo marido cuando nació”.
Tan horrendo como increíble es que el malhechor que pronunció esas palabras fue recibido con beneplácito en muchas partes, especialmente cada vez que visitaba un programa de chismes local, al que enviaba ofrendas florales, porque recibía el uno en las encuestas, lo cual revela la ignorancia y enfermiza mente de los televidentes.
Durante años Labatut estuvo visitando el set del programa, donde lo recfbnán con cariño y admiración.
Incluso la expresidenta de la Cámara de Representantes Jennifer González decidió hacerle un homenaje, y no fue por ignorancia, porque le hicieron llegar evidencias del alevoso crimen y de otras turbias actividades del susodicho.
Aunque le llagaron las palabras que dijo en el programa de Ojeda, la Cámara de Representantes le rindió homenaje, demostrando que estaba, está, integrada por gente rastrera y corrupta,
Fue, es, toda una apología del crimen cometido impunemente contra Carlos Muñiz Varela.
Comentarios
