Cínico convite…
25 de abril de 2017
|
Fue una cínica reunión o convite entre buitres que buscan dinero y asalariados que quieren más.
Todavía no está muy claro quién convocó a quién. ¿Fueron los amos de Almagro en el Departamento de Estado o fue el furibundo secretario general de la desprestigiada OEA?
La cosa es que el personaje en cuestión se reunió esta semana en Miami —¿dónde si no?— cinco o seis miembros de la llamada “disidencia” cubana. Cinco o seis mercenarios y mercenarias llevados desde la Isla. También, para que el show mediático fuera mayor, el anfitrión invitó a alguno que otro de los anclados en ese nido contrarrevolucionario del sur de la Florida.
Allí se celebraba, según el propio Almagro, algo que llamó con el pomposo nombre de Foro Estratégico Mundial.
¡Vaya usted a saber, cuál sería el contenido de la palabra estrategia en ese vulgar convite de trasnochados mercenarios!
En particular los temas más divulgados por la prensa fueron los relacionados con Cuba y Venezuela. El plan, en ambos casos, es el de estimular nuevas acciones con el intento —fallido por más de cinco décadas— de poner de rodillas al pueblo cubano; y en el caso de Venezuela, echar leña al fuego ya encendido de quienes se proponen acabar con la Revolución Bolivariana.
Son las mismas pretensiones de una institución cargada de la peor historia contra los pueblos de la región; ahora con un nuevo inquilino que parece haber descubierto que el dinero que allí recibe lo obliga a ponerse al servicio del peor postor.
Como en los más oscuros tiempos del auge de la contrarrevolución cubana —de aquí y de allá—, esta vez no podían faltar los Ileana Ros-Lehtinen y Mario Díaz-Balart. Ellos, a fin de cuentas, viven de eso, de la hostilidad contra la Isla, del engaño, de la fabricación de mentiras y… por supuesto, de los llamados para que Washington aporte más dinero y apoye sus camaleónicos planes de derrumbar la Revolución Cubana.
La fauna allí reunida no pudo estar mejor seleccionada. Desde Cuba fueron llevados, con pasajes y gastos pagos por los anfitriones, un grupo de mercenarios con las mismas diatribas trasnochadas y donde la palabra dinero floreció una y otra vez, como para recordar a sus empleadores que no olviden el sobrecito que le entregan luego de cualquier payasada anticubana.
Entre otras agencias de prensa convocadas para “cubrir” el acontecimiento, en un despacho de la española EFE se lee: “La delegación de la Asamblea de la Resistencia Cubana hizo entrega a Almagro de un documento donde se exponen las razones por las cuales el régimen castrista no es compatible con los principios sustentados en la Carta Democrática Interamericana de la OEA”.
Los correveidile que redactaron el papelucho y el inquilino de la desprestigiada OEA que lo recibió, olvidan la historia y no se quieren dar cuenta que Cuba jamás volverá a esa organización anti latinoamericana.
Cuba defiende la unidad de la región en la Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe (CELAC); en el ALBA, y en otros foros caribeños y latinoamericanos que impulsan el desarrollo, que usan la solidaridad como bastión fundamental y que apuestan a una zona de paz verdadera y sin injerencia imperial.
Comentarios