Bolsonaro, la pizza y 12 minutos de mentiras
22 de septiembre de 2021
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Solo comparable con las apariciones excéntricas de Donald Trump, cuando se le ocurre arremeter contra todos, amenazar, mentir y fabricar todo tipo de shows mediáticos, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, se ha hecho presente en la Asamblea General de la ONU, que comenzó este martes en Nueva York.
En completo desafío a los anfitriones e, incluso, cuando se le había advertido —como a todos los que concurren a las sesiones en la ONU— que había que llegar vacunado contra la Covid-19 para poder asistir, el negacionista Bolsonaro —quizás como parte del espectáculo— tuvo que conformarse con comer pizza en una acera frente al lugar donde se hospedaba en Nueva York, porque en ningún restaurante le podían servir comida sin presentar su credencial de «vacunado».
Y lo hizo con toda la intención que se pueda esperar de quien, no por gusto, se enorgullece de que se le llamen el «Trump del trópico».
Pero la foto junto a su delegación, ingiriendo un pedazo de pizza, no es lo más importante. Un despacho noticioso de RT recoge todo —o casi todo— lo que se le ocurrió decir durante 12 minutos en la Asamblea General de la ONU.
Mientras los analistas opinan que el mandatario perdió la oportunidad de mejorar la imagen de Brasil en el exterior y la prensa califica el discurso de «radical y repleto de mentiras», en las redes, el ‘hashtag’ #BolsonaroVergonhaDoBrasil (‘Bolsonaro vergüenza de Brasil’) se convirtió en tendencia.
El mandatario brasileño, que no está vacunado, defendió los remedios sin eficacia demostrada contra la Covid-19, que ya fueron descartados por la mayoría de los científicos, y se mostró en contra del pasaporte sanitario.
También aseguró que «en la Amazonía hubo una reducción de
32 % de la deforestación en agosto», en relación al mismo periodo del mes anterior. Pero omitió que, entre agosto de 2019 y julio de 2020, la mayor selva tropical del planeta perdió 8 712 kilómetros cuadrados y el 11 % tuvo lugar en áreas protegidas.
En las redes sociales el profesor y diputado federal por el estado de Sao Paulo, Ivan Valente sentenció: «Bolsonaro debería salir de Naciones Unidas e ir directamente a prisión después de tanta mentira».
Por su parte, el periodista Guilherme Amado afirmó que «Bolsonaro habla de un país en el que solo vive él y el 22 % que le apoya. Un Brasil paralelo, sin conexión con los 600 000 muertos por la Covid-19, los millones de desempleados, los hambrientos, los corruptos que desvían dinero de funcionarios, la economía mediocre, el odio desenfrenado, el dolor».
Es una pena que el gobernante brasileño no haya aprovechado sus 12 minutos frente al mundo para decir una sola verdad sobre lo que ocurre en su país.
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