Alepo y Mosul: semejanzas y diferencias
22 de octubre de 2016
|
Dos batallas de envergadura y que pueden ser decisivas en ambos casos se llevan a cabo en estos momentos contra la formación terrorista denominada Estado Islámico, tanto en Siria como en Irak, con el propósito de desalojarlo de sus dos más importantes locaciones, las ciudades de Alepo (Siria) y Mosul (Irak) que fueron ocupadas durante relampagueantes ofensivas lanzadas hace cuatro y dos años respectivamente.
En esas ocasiones, los terroristas siguieron tácticas más o menos parecidas y utilizadas anteriormente contra centros de población menores en tamaño y población, que pudieron igualmente ser conquistados en aquella fase donde la marea agresora parecía indetenible.
Recién iniciadas en territorio sirio, como se recordará, las acciones del Estado Islámico pasaron a suelo iraquí a través de la extensa frontera común, logrando establecer tras la ocupación de Mosul una amplia faja de territorio donde hoy está instalado el Califato, una especie de estado-nación regido por los terroristas y que abarca aun vastos territorios del noreste de Siria y del noroeste de Irak, dándoles continuidad.
Es de general conocimiento y está suficientemente documentado en los medios de prensa internacionales, las redes sociales y otras fuentes públicas que los patrocinadores, abastecedores y financistas del Estado Islámico fueron Estados Unidos y socios de la OTAN, Turquía, Arabia Saudita y Qatar, cada uno en diferentes proporciones y unidos por el objetivo común de derrocar al gobierno sirio de Bachar Al-Assad y al gobierno chiita iraquí, al que consideraban muy próximo a Irán.
Complicaciones políticas posteriores que fueron surgiendo con el desarrollo de ambas guerras de agresión, así como los escandalosos crímenes y atrocidades cometidas sobre todo por los integrantes del estado islámico, (donde participan europeos, chechenos, uguresy un mosaico de nacionalidades) fueron creando un poderoso estado de opinión mundial que obligó a algunos de los antes mencionados patrocinadores a matizar sus posiciones originales de apoyo a los terroristas.
Al sentirse fortalecido por los avances militares y por el poder económico que ello le significó, al controlar zonas petroleras, el otrora obediente Estado Islámico escenificó aparentes acciones de desobediencia hacia sus tutores, motivando a algunos de ellos a reprimirlo y a crear la denominada “coalición internacional” que encabeza Estados Unidos y ahora se plantea la reconquista de Mosul.
En Siria, que se mostró como el objetivo inicial de los terroristas y donde existen otros grupos armados menores las cosas ocurrieron de manera distinta pues allí el Ejército Nacional y la población incorporada a la lucha hicieron feroz resistencia desde el principio, evitando el inmediato derrocamiento del gobierno constitucional y recibiendo posteriormente una fuerte ayuda rusa que ha colocado a los terroristas allí en una difícil situación.
La batalla por Alepo y la batalla por Mosul tienen –y es bueno aclararlo– semejanzas y diferencias que están determinadas por los objetivos actuales de ambas guerras pero, sobre todo, por sus propósitos posteriores.
Comentarios
