Primera interpretación en Cuba del “Capricho italiano”, de Chaikovsky
29 de marzo de 2013
El “Capricho italiano” fue iniciado en Roma durante el segundo viaje realizado por Chaikovsky a Italia, a fines de 1879, y consiste en una fantasía descriptiva muy libre, basada en temas populares italianos.
Durante esa segunda estancia en Italia, Chaikovsky pudo visitar, a modo de gira, las grandes ciudades de ese país, como Roma, Nápoles y Milán, y en cartas a su protectora Nadiezsha von Meck, el compositor hablaba de las magníficas voces de los coros, de las visitas a los museos, de los numerosos monumentos y obras de arte, de la magnificencia del Coliseo romano y, por supuesto, de los frescos de Miguel Angel en el Vaticano. Y así, recorriendo paso a paso cada pulgada de esas legendarias ciudades italianas, Chaikovsky tomó apuntes, recogió melodías y elaboró con esos materiales esta obra que ha corrido muy buena fortuna en el repertorio de conciertos.
El “Capricho”, que había sido iniciado en Roma, fue concluido en Moscú y estrenado en esa misma ciudad bajo la dirección de Nicolás Rubinstein. Y cuarenta y nueve años más tarde, Gonzalo Roig lo ponía en los atriles de una orquesta cubana, en este caso la Sinfónica de La Habana, efectuando así la primera audición en nuestro país de esa popular obra de Chaikovsky. Eso ocurrió en el entonces Teatro Nacional, hoy Gran Teatro de La Habana, en 1929, UN DIA COMO HOY.