Primera interpretación en Cuba de la versión original del Bembé, de Alejandro García Caturla

29 de marzo de 2013

El 17 de septiembre, el de 1963, se interpretó por primera vez en Cuba el “Bembé”, de Alejandro García Caturla.
En 1929, dos años después de la creación de las Tres Danzas Cubanas, Caturla escribió la obra titulada “Bembé”. En ella, el compositor cubano se planteó la misma finalidad que promoviera en toda su producción artística, es decir, la cristalización de los elementos esenciales de las formas de la música popular de nuestro país, elevándolas a un nivel técnico y sonoro de mayor rango intelectual, con lo que les proporcionaba mayor trascendencia y universalidad.
El “Bembé” está inspirado en la música interpretada en las fiestas rituales de origen africano y de ese mismo nombre. Y en su primera versión, es decir, la de 1929, la obra fue escrita para un conjunto integrado por instrumentos de viento, piano y percusión, con un resultado sonoro vital y alucinante. Aquí, tanto los vientos como el piano se convierten en percutores, y el tratamiento armónico es audaz y avanzado. Por otra parte, el carácter eminentemente rítmico de la obra permite a Caturla la elaboración de una intrincada trama polirítmica de atmósfera frenética y excitante.
En esa, su versión original para instrumentos de viento, piano y percusión, el “Bembé” se estrenó en París en 1929, pero en la patria del compositor transcurrieron
34 años antes de interpretarse por primera vez en un concierto público. Y eso ocurrió en uno de los conciertos ofrecidos por los conjuntos instrumentales de la Orquesta Sinfónica Nacional, bajo la dirección de Manuel Duchesne Cuzán, en 1963, UN DIA COMO HOY.