Primera audición en Cuba de la Tercera Sinfonía, Op.22, de Tijón Jrennikov
29 de marzo de 2013
Un 1º de junio, pero de 1975, se interpretó por primera vez en nuestro país la Tercera Sinfonía, Op. 22, del compositor ruso Tijón Jrennikov, quien había nacido en Elets, en 1913.
Jrennikov estudió con Litinski y Shebalín en el Conservatorio de Moscú, donde se graduó en 1936. Poco después, y hasta la desaparición de la Unión Soviética, se convirtió en una de las personalidades más importantes de la vida musical en su país, y ostentó los cargos de Diputado al Soviet Supremo de la URSS y de Presidente de la Unión de Compositores soviéticos.
Entre las obras más destacadas del extenso catálogo de Tijón Jrennikov se encuentran las óperas Frol Skoboyev, de 1950 y La madre, compuesta en 1957; la música incidental para “Mucho ruido y pocas nueces”, de Shakespeare; tres sinfonías; un Concierto para piano y Canciones sobre poemas de Pushkin.
El lenguaje de Jrennikov se mantuvo fiel a los principios de la tonalidad dentro de sus corrientes modernas, así como la expresión emotiva y la temática directa, basada con frecuencia ésta última, en elementos de origen folclórico.
La Tercera Sinfonía de Tijón Jrennikov, que ocupa el opus 22 en el catálogo del compositor, fue editada en Moscú en 1973. Y sólo dos años después se interpretaba por primera vez en Cuba, en un concierto de nuestra Orquesta Sinfónica Nacional, dirigida en esa ocasión por el maestro invitado Roberto Sánchez Ferrer. Eso ocurrió en el Teatro “Amadeo Roldán” de La Habana, en 1975, UN DIA COMO HOY.