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Premier del ciclo de “Canciones a los niños muertos”, de Gustav Mahler

29 de marzo de 2013

Entre 1902 y 1904, el compositor austríaco Gustav Mahler realizó un ciclo de cinco canciones para voz y orquesta, basadas en otros tantos poemas, seleccionados entre los casi cien escritos por Friedrich Rückert con motivo de la muerte de sus dos pequeños hijos. Por cierto que en esa selección, Mahler demostró un excelente gusto literario, pues escogió en realidad las cinco páginas más valiosas entre los numerosos poemas mediocres escritos por Rückert para tan noble y dolorosa ocasión.
Cuando Mahler comenzó sus Canciones…., en 1902, era aún soltero, por lo que estaba muy lejos de conocer por propia experiencia el dolor paternal por la pérdida de un hijo. Pero, al terminarlas en 1904, el compositor tenía ya dos pequeñas hijas como resultado de su matrimonio con Alma María Schindler. Entonces, su propia mujer le reprochaba que se afanara con tanta intensidad en el trabajo de esa obra, teniendo en cuenta que sus dos pequeñas criaturas gozaban de una perfecta salud.
Mahler, sin embargo, no sólo continuó su creación imperturbablemente, sino que convirtió los poemas de Rückert en cinco canciones realmente impresionantes por su belleza melódica y su magnífica plasticidad sonora, al punto que puede afirmarse, sin temor, que el ciclo en total constituye una de las mejores elegías líricas de toda la historia musical.
Tres años después de terminar estas Canciones, o sea, en 1907, los acontecimientos convirtieron a Mahler en un cantor anticipado a la muerte de una de sus hijas a causa de la escarlatina, la misma enfermedad que llevó a la tumba a los hijos de Rückert.
La belleza sonora y la calidad expresiva de estas soberbias canciones de Mahler apenas admite paralelos en la historia musical.
Los “Kindertotenlieder” es un impresionante monumento artístico, tanto por su dramático tema como por la forma en que Mahler trasladó a la música el doloroso lamento implícito en los poemas de Rückert.
El ciclo “Kindertotenlieder” o “Canciones a los niños muertos” se estrenó en Viena, hace 103 años, UN DIA COMO HOY.