Nace el director de orquesta austríaco, Erich Kleiber

29 de marzo de 2013

La efeméride que hoy evocamos trata acerca del nacimiento, en 1890, de una de las grandes figuras de la dirección orquestal contemporánea cuyo nombre es todavía recordado con respeto y afecto por el público de conciertos de nuestro país.
Se trata de Erick Kleiber, cuya formación musical tuvo lugar en Praga y, a los veintidós años de edad, inició su carrera profesional como director en Darmstad, ciudad donde trabajó entre los años 1912 y 1918. Luego, Kleiber dirigió en Wupertal entre el 19 y el 21; y en Mannheim, entre el 22 y el 23.
Ese año de 1923 marcó para Kleiber su entrada en el gran mundo de la música, ya que pasó a ocupar la plaza de director musical de la Opera Estatal de Berlín, con sólo 33 años de edad. Su estancia en el famoso edificio dedicado a la ópera, en la famosa avenida Unterdenlinden de Berlín, se extendió hasta 1934 y todos los historiadores están de acuerdo en que fue ese el período más brillante de toda la vida de ese Teatro.
En la Staatsoper berlinesa, Kleiber no sólo abordó magistralmente todo el repertorio tradicional de ese género, sino que produjo los estrenos mundiales del Wozzeck, de Alban Berg y de Cristóbal Colón, de Milhaud. El director austríaco incorporó también al repertorio de ese Teatro obras como Jenufa, de Janacek y Swanda, el gaitero, de Weinberg.
Sin embargo, la intención de Kleiber de estrenar, en 1934, la ópera Matías, el pintor, de Hindemith provocó una controversia con las autoridadews nazis, ya que tanto Hindemith como Kleiber eran vistos con recelo por los jerarcas del fascismo alemán. Por esa razón, el director austríaco se vio precisado a abandonar Alemania, a la que no volvería hasta 1950.
Desde 1930, Kleiber había comenzado a realizar presentaciones en varios países de Europa y América. Así, en ese año dirigió la Sinfónico-Filarmónica de Nueva York; en el 35 actuó en Milán; entre el 33 y el 38 en Amsterdam: y entre el 37 y el 49 en Buenos Aires, Santiago de Chile, Caracas y otras ciudades latinoamericanas. Fue en esa etapa que actuó en nuestro país con la Orquesta Filarmónica de La Habana, efectuando su primer concierto en marzo de 1943. Más tarde asumió la dirección titular de dicho conjunto hasta 1947.
Entre 1950 y 1953, Erich Kleiber trabajó en el Covent Garden de Londres, donde ofreció la primera puesta en escena del Wozzeck, de Alban Berg en ese país, así como un memorable Caballero de la rosa, de Ricardo Strauss. Tres años más tarde, Erich Kleiber fallecía en Zurich, a los 66 años de una vida que se había iniciado en Viena, en 1890, UN DIA COMO HOY.