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Nace a la vida musical la Orquesta Sinfónico-Filarmónica de Nueva York

29 de marzo de 2013

Un 20 de marzo, el de 1928, se iniciaba la vida artística de la Orquesta Sinfónico-Filarmónica de Nueva York, cuya historia es la más extensa entre los organismos de ese tipo que hoy existen en los Estados Unidos.
Sus orígenes se remontan a la llamada Sociedad Filarmónica de Nueva York, que fuera fundada en 1842 y que duró cincuenta años bajo la regencia de directores como Leopold Damrosch y Theodore Thomas. A partir de 1892 se estableció el principio de contratar un director permanente que alternaba con invitados. Y así, entre los titulares de la Filarmónica de Nueva York en las primeras décadas del siglo veinte, encontramos nombres tan destacados como los de Willem Mengelberg, Gustav Mahler y Arturo Toscanini.

En 1928, la Orquesta Filarmónica se unió a la Sinfónica de Nueva York, para convertirse en la Sinfónico-Filarmónica, etapa que inauguró Mengelberg y continuaron Barbirolli, Rodzinsky y Bruno Walter. Ya en los años cincuentas, comenzó a dirigir dicha orquesta como invitado el norteamericano Leonard Bernstein, quien llevó al conjunto neoyorquino una nueva concepción basada en la espectacularidad del sonido, la pulcritud de los timbres y un cierto manierismo en el enfoque personal de las partituras. En 1958, Bernstein fue nombrado director permanente de la Filarmónica de Nueva York, cargo que abandonó en el 69 y fue sustituido por el francés Pierre Boulez, quien se desempeñó como titular entre 1971 y 1977.
En el 78, el hindú Zubin Metha sustituyó a Boulez y permaneció al frente de la orquesta hasta que en 1991, el alemán Kurt Masur se hizo cargo de ese codiciado puesto. La estancia de Masur en la Filarmónica de Nueva York, la cual se extendió desde el 91 hasta el verano de 2002, se caracterizó por el predominio de los compositores románticos, especialmente los vieneses y alemanes, tal y como había hecho durante su muy larga estancia en el podium de la Gewandhause de Leipzig.
Para la temporada que comenzara en septiembre de 2002, la Filarmónica neoyorquina contaba en su podium con el franco-norteamericano Lorin Maazel, quien contaba por entonces 72 años de edad.

Y al evocar el octogésimo aniversario de la creación de la Filarmónica neoyorquina, les diré que ese hecho ocurrió en 1928, UN DIA COMO HOY.