Fuerzas militares asesinan al General Quintín Banderas

29 de marzo de 2013

Fuerzas militares asesinan al General Quintín Banderas.

Tras una farsa electoral, que culmina en la reelección de Tomás Estrada Palma, el Partido Liberal encabeza un levantamiento armado que la historia recoge con el nombre de “” la guerrita de agosto “”. Algunos patriotas honestos deciden unirse al alzamiento. Entre estos hombres de honor están los generales Enrique Loynaz del Castillo y Quintín Banderas, quienes consideran un deber contribuir al rescate de la dignidad nacional.
El gobierno reprime violentamente a los alzados, para lo cual utiliza unos 3 mil soldados de la Guardia Rural y una milicia organizada con antiguos voluntarios de la metrópoli y personas de pésima condición moral.
Los alzamientos más importantes de “” la guerrita de agosto “” se producen en Pinar del Río, Las Villas y La Habana, donde Quintín Banderas encabeza exitosas acciones. El régimen ordena perseguirlo hasta su eliminación física, sin tener en cuenta que se trata de un digno patriota que combatió heroicamente por la independencia durante 30 años.
Una tropa, dirigida por el capitán Ignacio Delgado, ataca el campamento de Quintín Banderas a altas horas de la noche. El jefe mambí y sus acompañantes se defienden con extraordinario valor hasta que, finalmente, son brutalmente asesinados. El gobierno impide que se realice el velorio y que el pueblo acompañe el sepelio del heroico luchador. Quintín Banderas es sepultado en fosa común, sin señalamiento alguno que identifique su tumba.
Es ésta otra sombría y sangrienta página en la historia de la república neocolonial.