Estreno mundial del Segundo Concierto para piano y orquesta, de Eduard MacDowell
29 de marzo de 2013
El compositor norteamericano Eduard MacDowell (1861-1908) nació y murió en Nueva York, y allí realizó estudios de piano con Teresa Carreño antes de viajar a Europa e ingresar en los Conservatorios de París y Francfurt.
En realidad, pocos años necesitó MacDowell para ganar fama y prestigio como músico, y así, en 1881 ya era profesor de piano en el Conservatorio de Darmstad, y en el 82 visitó a Franz Liszt en Weimar.
Como es sabido, fue el gran músico húngaro quien le recomendó a MacDowell la publicación de su Primera Suite Moderna y del Primer Concierto para piano y orquesta.
De regreso en los Estados Unidos, en 1888, MacDowell dedicó el resto de su vida a la enseñanza, a tocar el piano como solista y a la composición de sus propias obras. En 1904 renunció a la dirección del Departamento de Música de la Universidad de Columbia, por motivo de una áspera polémica que llegó a extremos inusitados de violencia.
Aunque la producción de MacDowell fue muy escasa, su figura y sus obras poseen gran importancia para la música norteamericana, ya que su obra constituye la muestra más relevante del romanticismo musical de ese país.
Sobre todo en sus dos Conciertos para piano y orquesta, MacDowell refleja los ecos del romanticismo europeo con un melodismo encantador y una fuerte tendencia a proyectar vivamente la naturaleza.
Y en la premier mundial del segundo de esos Conciertos para piano, que es la efeméride que estamos recordando, intervino el propio MacDowell como solista y la dirección orquestal estuvo a cargo del legendario maestro Theodore Thomas. Eso ocurrió en Nueva York, hace 119 años, UN DIA COMO HOY.