Discurso de José Marti en el Hardman Hall en homenaje a José Martí

29 de marzo de 2013

José Marti y Pérez (1853-1895), nombrado por algunos como Apóstol de la independencia de Cuba,Héroe Nacional de Cuba ,ha publicado ya en 1889 obras literarias que permiten considerarlo como un clásico de las letras hispanas.
Desde 1869 que publica sus primeros escritos en El Diablo Cojuelo,hasta esta fecha, tiene en su haber,El Presidio Político en Cuba,testimonio de las dolorosas jornadas que le toco vivir en los trabajos forzados en las canteras de San Lázaro,su drama Adultera,el juguete Amor con amor se paga,algunas de sus Escenas norteamericanas,el Ismaelillo, iniciador del modernismo, Amistad funesta,y las revistas que integrarían después el volumen de La edad de oro.
José Maria Heredia el autor de la Oda al Niagara y del Himno del desterrado conmovía a Marti que reconocía en el las excelencias del poeta y la dignidad de un hombre torturado en el exilio y ansioso de morir en su patria.
El 30 de noviembre se estrenaba en el Hardman Hall en Nueva York la breve obra.
Los ultimos romanos de la autoría de Heredia y que había sido publicada por el en la revista Miscelánea en diciembre de l829 , no obstante su brevedad comunicaba dignidad y fuerza , tanto por lo simple y hábil de su acción como por la hábil versificación de los versos. Las intenciones de los patrocinadores era recolectar fondos para comprar la casa natal del poeta en Santiago de Cuba , en esa jornada patriótica Marti fue invitado a pronunciar un discurso.
En su discurso de esa noche en el Hardman Hall dio a la historia el conocimiento y el entendimiento hacia quien había sido un hombre cuya esencia era ya en su tiempo genuinamente cubana.
En este discurso del 30 de noviembre Marti entre otras ideas, magnifica la educación recibida por Heredia y el papel representado en la misma por su padre, con lo cual reafirmaba su predica de que la educación comenzaba en la cuna y terminaba en la tumba.
Fue un discurso ejemplar, en esa memorable noche la historia unió a dos grandes hombres, orgullo de la nación cubana.