La Habana en 300 instantáneas

16 de noviembre de 2019

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Ofelia Sandar Valles

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Cuba, Cultura, Eusebio Leal Spengler, Habana 500, ICL, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Oficina del Historiador de La Habana

Fotos: Alexis Rodríguez

 

 

Con la presencia del Presidente de la República, Miguel Diaz-Canel Bermúdez, se presentó el libro Noble Habana, en la calle de Madera del Centro Histórico habanero, un fastuoso regalo de Alejandro Azcuy a la otrora Villa de San Cristóbal en su medio milenio.

 

 

En un primer momento, la Directora de Comunicación de la Oficina del Historiador, Magda Resik Aguirre dijo que traía la encomienda de prestar su voz, que para nada sustituiría la del Dr. Eusebio Leal Spengler, Historiador de La Ciudad de La Habana, para leer un fragmento del prólogo del libro donde “se resume mucho de la filosofía que anima el trabajo del Historiador que está enviando orientaciones todo el tiempo para que los festejos y las celebraciones se cumplan de la mejor manera, tanto como él lo soñó”.

Leal refiere en sus palabras que los cubanos que llegan a La Habana desde otras provincias se sorprenden, y los extranjeros algunas veces repiten para tristeza nuestra: “ustedes no saben lo que tienen”, sobre todo cuando sin visión de futuro, los desamorados dejan agonizar la ciudad bella.

“Se requiere un intenso amor que trasciende lo citadino y que entra de lleno en lo cubano porque La Habana es, como capital, una superior entre iguales. No es que sea mejor, es que es diferente y me atrevo a afirmar que no lo es solo en el limitado alcance del archipiélago cubano, ni siquiera de La Antillas… lo es en América y en el mundo”.

”Difícil resulta –continua el prólogo del Historiador– establecer una diferencia entre lo material y lo intangible. Es como tratar de separar a un anciano de sus recuerdos. Medio milenio después la ciudad remeda lo que fue, es y será. Cuando se pierde la memoria se pierde todo. Le es fácil al leñador cortar los árboles y al demoledor caer sin compasión sobre los muros.

 

 

”….Por todo y para todo ello se da a la imprenta este libro fruto de la inspiración de Alejandro Azcuy Domínguez. Resulta evidente ante sus imágenes que no ha sido su deseo extraer del universo que las rodea a las personalidades que ha escogido. En cada una de ellas encarna el lejano pasado, que viene como adarga al brazo, porque solo la obra y sus frutos ameritan, a juicio de la artista, hallarse en sus páginas”.

En las palabras de presentación del libro Noble Habana, el director de la Biblioteca Nacional, Eduardo Torres Cuevas destacó que las imágenes que se reflejan nos permiten adentrarnos en aquellos pequeños detalles de nuestra ciudad. “Nos adentramos en lo que la ciudad nos da como esa construcción del hombre, pero también en el espíritu del hombre”.

 

 

“La obra recoge figuras importantes para dar esa creatividad, esa variedad, esa riqueza que tiene nuestra Habana. Pienso al ver estas personalidades algo que he compartido siempre con Eusebio: nuestra pasión por las figuras que nacieron e hicieron de Cuba una Cuba pensada, no solo la Cuba soñada. Hombres como Félix Varela, José de la Luz y Caballero, Bachiller y Morales; todos ellos pueden explicar a Martí. Martí no es un fenómeno aislado de lo que fue su cultura habanera. Y esa Cuba creada esta en esos artistas, pero también en las imágenes que el libro recoge.

“Es un ejemplar que apasiona y que se disfruta. Y no solo se disfruta, se aprende y se ve lo que no siempre es visible, lo que está ahí en el detalle y en la magnitud de la obra de construcción de La Habana. Celebrar el 500 aniversario de La Habana es un privilegio de las generaciones que la vivimos hoy, y además el privilegio de que estamos recibiendo en nuestra Habana como lo refleja el volumen el aporte de millones de sus hijos que durante cinco siglos ayudaron a construir esta ciudad. Cambiaron, generación tras generación, la imagen de su Habana como tendrá la generación actual que ayudar a la nueva visión del siglo XXI de esta ciudad maravilla”, concluyó Torres Cuevas.

 

 

Por último y no menos importante, el autor del libro se dirigió a los presentes a través de “Una crónica de un aprendizaje” que escribiera para la ocasión.

Alejandro reconoció que Noble Habana “es un homenaje a La Habana en su aniversario 500 y una invitación al convite por cinco siglos de historia, cultura y esplendor. El volumen está dedicado a todas esas imágenes de la capital cubana que solo podemos ver ya en la memoria y en el afecto”, aseguró Azcuy.

El autor reveló que se trata de un recorrido íntimo por su ciudad natal “de caminar arriba y abajo, de día y de noche con el objetivo de darle a su presente inmediato, a su fugacidad, un carácter permanente, y construir así fragmentos de nuestra futura memoria, imágenes de la historia que compartiremos”.

La obra, publicada por el sello Collage Ediciones, del Fondo Cubano de Bienes Culturales, atesora 300 imágenes que se lograron en poco más de cuatro meses. Asimismo la definen tres características fundamentales que hacen la diferencia con lo que en otras oportunidades se ha hecho de La Habana en muchísimos libros.

“En primer lugar –expresó Azcuy– el recorrido bastante acucioso que se hace de la ciudad, aunque sin dudas se quedan muchos lugares fuera porque es muy difícil en un solo texto incluir todo”.

“Los que tengan la oportunidad de adquirirlo podrán acceder a imágenes de patrimonio, arquitectura, tradición, cultura y economía. Hemos tratado que todos los municipios estén reflejados a partir de lo más relevante que hay en ellos”.

 

 

En segundo lugar el uso de la fotografía aérea le da un color diferente a todo lo relacionado con los paisajes urbanos “porque la tecnología del dron en los últimos tiempos ha evolucionado tremendamente y en el medio se ha empleado muy poco. Por lo tanto, hay imágenes que son espectaculares y que te ayudan a redescubrir la ciudad”, aseguró Alejandro.

La tercera característica y probablemente la más importante es el hecho de la presencia de la gente. “Hay una serie de retratos tanto a personas anónimas que hacen la vida de la ciudad todos los días, como a personalidades ya establecidas dentro de todos los sectores: la ciencia, el deporte, la cultura, las artes”.

“Durante varios meses he vuelto a transitar las antiguas calles de mi urbe, pero esta vez buscando ese aprendizaje del que habla Carpentier. Sin embargo, si a alguna conclusión he llegado al terminar este recorrido es que luego de andar y desandar la ciudad el misterio no sede”, concluyó.

 

 

Otro momento de la mañana estuvo dedicado a la exposición de la edición especial aniversario 500 de la revista Habanahoy, de la Asamblea Provincial del Poder Popular de la capital. En sus páginas rinde especial tributo al habanero universal que es José Martí. La publicación resalta también los emblemas de la ciudad y sus identitarios significados: el Morro y su cañonazo, la histórica Plaza de la Revolución, el Malecón y La Habana Vieja Patrimonio de la Humanidad, entre otros.

 

 

A las presentaciones asistieron además Esteban Lazo Hernández, Miembro del Buró Político y presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular; Luis Antonio Torres Iríbar y Reynaldo García Zapata, Primer Secretario del Partido y Presidente del Gobierno en la capital, respectivamente. Escritores, artistas, deportistas y representantes de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, entre otras personalidades.