La AHS y los proyectos comunitarios

17 de octubre de 2013

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Ofelia Sandar Valles

Si algo bueno tienen los Congresos, entre otros aspectos, es poder mostrar cuánto se hace en cada rincón de la Isla una asociación u organización determinada. Tal es el caso de la Asociación Hermanos Saíz, que en medio de su magna cita ha sacado a la luz proyectos culturales liderados por jóvenes en distintos parajes de la geografía nacional.

Así lo hizo saber Liudmila Quincoses, joven escritora y promotora cultural del conocido proyecto Escribanía que se desarrolla desde algunos años en la provincia de Sancti Spíritus.
Recientemente en la Mesa Redonda, la escrito intervino para resaltar la importancia que reviste el hecho de que los que impulsan las revoluciones de pensamiento cultural casi siempre tienen una sensibilidad. Ella asintió que “es importante contar con los artistas a la hora de tomar decisiones, implicarlos a todos en las transformaciones que tiene la sociedad cubana actual”.
Se refirió asimismo a la labor de las casas del joven creador en la Mayor de las Antillas, fundadas con una programación muy interesante. “Empezaron siendo solo para este grupo etario pero de pronto se convirtieron en grandes centros culturales donde la gente puede ir y disfrutar de variadas iniciativas.
“Nosotros en Sancti Spíritus decidimos salir de la institución y hacer cultura comunitaria a partir de una jornada de programación denominada Lunas de Invierno, y una vez al año, en diciembre, llevamos compañías de danza. En nuestra provincia no se estudia danza por lo que hay un gran déficit de ello o sea la gente nunca puede ver esa manifestación”.
“Sin embargo, en ese mes del año llevamos a distintas compañías danzarias cubanas, por ejemplo Danza teatro Retazos, Danza Contemporánea, también teatro para que a la gente que de pronto vaya caminando por la calle lo sorprenda el hecho cultural”.
“También hemos organizado -aseveró Liudmila- conciertos en barrios, en la propia calle de la Escribanía, hemos cambiado el entorno de la ciudad porque los jóvenes pintores han realizado sus obras en los muros de la localidad. Creo que de alguna manera, en el buen sentido de la palabra, hemos contaminado a las personas que viven en comunidades alejadas de los grandes centros culturales, gente que no puede acceder a los teatros, que no tienen la posibilidad de estar en contacto con los sucesos que acontecen en la urbe. Son muy agradecidos cuando uno lleva a los artistas a su barrio.
Quincoses, se refirió también a que el mayor acontecimiento de cultura comunitaria que ocurre en Cuba es la Feria del Libro, y en ese sentido dijo “en nuestra provincia aportamos muchísimo porque llevamos a los escritores jóvenes al barrio y también visitamos las prisiones donde está la juventud reclusa para crear brigadas denominadas ´Dar sin frontera´, hacemos el concurso de las cartas de amor, sumamos trovadores, raperos y se sienten muy agradecidos cuando llevas el arte a ese lugar porque conocen lo que está pasando con la Asociación Hermanos Saíz.
La destacada promotora cultural comentó que en la etapa de verano o en las Lunas de invierno, la gente conoce esa labor y se siente comprometida también con este movimiento cultural que se está acercando a su propio entorno, a la calle para que también se convierta en protagonista de lo que está pasando.
En su intervención además narró que otro proyecto interesante que desarrollan es Puente de metal, en Jatibonico, un pueblo que solo atesora un gran central azucarero. “Ese núcleo de creadores que tenemos allí es eminentemente roquero con peñas del género, grupos de rock que pudiera parecer chocante. No todo el mundo puede entender cómo funciona ese proyecto en medio de un Batey. El presidente del gobierno ha hecho buenas migas con la AHS del lugar, con Yosvel, que atiende este proyecto como el jefe de célula de Jatibonico y le da participación en todas las fiestas populares que se realizan en la zona para que lleve conciertos de rock y haga su Festival Puente de metal, eso dice mucho de la existencia de la AHS, demuestra que es fuerte; pero necesita sin dudas del apoyo de las direcciones provinciales de cultura, de una sensibilidad, de una voluntad política o sea de que se le entienda y todo el mundo sea partícipe de los proyectos de los jóvenes porque en definitiva uno devuelve cultura, esa energía y esa ganas de incluir a todos en el suceso cultural que la AHS a lo largo y ancho del país propone con sus iniciativas, con los bríos que tienen los jóvenes que lo renueva todo.
Otro aspecto destacado por la joven escritora es el hecho de que la asociación haya podido impulsar sus propias editoriales porque “ninguna está en La Habana, están en las provincias y es buenísimo porque los noveles escritores pueden acceder a sus casas editoras y acercarse al trabajo de los jóvenes escritores ahí en cada territorio, o sea es una oportunidad importantísima porque hace algunos años era mucho más difícil publicar, darse a conocer pero tenemos excelentes editoriales que han realizado ingentes esfuerzos por mantenerse, por mejorar en calidad en todo”.
“Una muestra de ello es que en esta misma jornada de la cultura se presentarán en el Pabellón Cuba, como parte de las actividades del Congreso, títulos de estos sellos editoriales que en definitiva son provinciales pero son muy buenos y no tienen nada que envidiarles a las nacionales y me gustaría llamarles así editoriales de la AHS, no provinciales”, dijo Quincoses.
Sobre su activa participación en las redes sociales habló Liudmila. Ella considera que los miembros de la AHS han tenido la suerte de contar con salas de navegación abiertas en todo el país lo que permite que sus afiliados accedan a la información, puedan tener su blog, contar con nuevas tecnologías y tener presencia en el mundo de la INTERNET, que aunque un poco lenta, existen. “Nuestro país ha realizado un verdadero esfuerzo  para que tengamos la posibilidad de conectarnos con el mundo  y se ha visto realmente cómo son los jóvenes cubanos, cómo piensan, qué sienten, qué escriben. Resulta valioso que en el orbe se conozca la manera de pensar de esa generación y en esto también la AHS ha jugado un vital papel.