¡Haz que la música suene!…

12 de septiembre de 2014

|

Luis Enrique Ramos

|

Barry White, Estados Unidos, Música

 

Barry White in memoriam

 

Este viernes habría cumplido 70 años si la enfermedad no lo hubiese arrebatado de la producción musical activa.
Pocos identificarían su nombre verdadero: Barrence Eugene Carter; pero todos los que pasamos de cuarenta sabremos de quien se trata si nos dicen: ¡Barry White!

Nacido en Galveston el 12 de septiembre de 1944, tuvo una infancia marcada por su condición de americano negro. Su adolescencia trascurrió en la pobreza. Transgredió la ley, robando piezas de autos dentro de una pandilla juvenil.
Se dice que mientras estaba en prisión oyó It’s Now or Never en la voz de Elvis Presley, y que tal cosa enrumbó su destino musical y profesional. Barry fue una suerte para tres generaciones sucesivas, a las que hizo vibrar de emoción con su timbre cálido y profundo; con su voz entre Louis Armstrong y Bola de Nieve.
En 1969 consolidó su primer acierto al integrarse con el grupo vocal al que denominó Love Unlimited. Precisamente con una de sus integrantes, Glodean James, contrajo matrimonio poco después.
A los 30 años de edad, Barry White alcanzó el tope de la fama. En 1972 Love Unlimited se sobredimensionó de grupo vocal en orquesta; y dos años más tarde, de sus brillantes instrumentaciones brotaron las notas de La medianoche y tú (Midnight and You), Siento que viene el amor (I Feel Love Coming On), y sobre todo el inolvidable y expresivo Tema de Amor (Love´s Theme), melodías que llenaron un álbum de 38 minutos titulado Rhapsody in White.

Ver video: www.youtube.com/watch?v=V6NVnKFyY24

 

Aquellos timbres mágicos y conmovedores acompañaron a millones jóvenes de entonces en sus ensueños e ilusiones, y transmitieron todo lo que su alma sensible volcó en la música. Una batería de violines, más los instrumentos de viento de madera y los metales, sirvieron de complemento a sus cinco guitarras eléctricas y a su batiente percusión con estructuras repetitivas; y a su voz… ¡sobre todo a su voz!: su voz inolvidable.
Más de cuatro decenas de álbumes, premios Grammys y conciertos en todo el mundo le proyectaron a la infinitud. Fue uno de los creadores de la corriente “Disco” que marcó a los años 70 y sus más sobresalientes figuras. Innovó en el Rhythm and Blues, que lo universalizó.
Barry falleció en Los Ángeles el 4 de julio de 2003, a los 58 años de edad, debido a una enfermedad crónica del corazón. Sus restos fueron cremados y sus cenizas esparcidas por sus familiares en aguas del océano Pacífico, junto a la costa californiana. El 20 de septiembre de 2004, su nombre fue agregado póstumamente al Dance Music Hall of Fame, en New York.
Ya ha recorrido 70 años, pero quienes lo admiramos haremos cumplir su mandamiento transmutado en melodía llena de amor y alegría: “Let´s the Music Play”: ¡Haz que la música suene!…