Estilo, creación y poesía convergen en la obra “Choy-León”

17 de marzo de 2022

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Francisco Delgado

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Arquitectura, Centro HIstórico de La Habana, Cuba, Cultura, Magda Resik, Oficina del Historiador de La Habana, Patrimonio

Fotos: Alexis Rodríguez

 

 

Con una vasta experiencia en el conocimiento de la arquitectura, la docencia y el diseño urbanístico en Cuba y con referencia en América Latina y otras latitudes de la geografía universal, los consagrados y apasionados José Antonio Choy y Julia León proponen un estudio concienzudo del aporte de la arquitectura nacional al patrimonio de una ciudad soñada y deseada por sus habitantes.
El título “Choy-León: obras y proyectos”, a cargo de la Editorial Aurelia, nos confirma la idea del valor trascendental de un testimonio único de su tipo en la historiografía y la memoria de la arquitectura cubana. A su interior se puede percibir la exquisitez, singularidad y belleza de un conjunto de obras que dialogan de forma armónica con la Modernidad y el entorno caribeño de nuestro imaginario social.
Más de 20 años de carrera profesional dedicada a la defensa de una identidad creativa en su estilo, validan este ejercicio monográfico de pensar la especialización de la arquitectura, como una labor sinfónica y artística capaz de explorar los escenarios y ambientes más complejos de la vida cotidiana.
Su obra expone los referentes de una cultura en la maestría del arte de la arquitectura que va narrándose de forma amena y emotiva, tomando en consideración a los más importantes exponentes de la especialidad que terminaron influyendo el contexto cubano, donde se distinguen los nombres de los italianos Roberto Gottardi, coautor junto a Ricardo Porro y Vittorio Garatti de las Escuelas de Arte de La Habana, junto a los expertos cubanos Roberto Segré, Mario Coyula y Sergio Baroni, estos últimos ya fallecidos.

 

 

Durante la presentación de este volumen único de la arquitectura cubana, la Directora de Comunicación de la Oficina del Historiador de la Ciudad de la Habana, Dra. Magda Resik, evocó la maravillosa obra de Gottardi, que prestigia a estos dos arquitectos que han sabido proteger a la ciudad con la funcionalidad de los espacios urbanos, tanto interiores como exteriores, resaltando el valor de sus ideas como una suerte de culto.
Por otra parte, destacó la importancia de este Centro Taller Roberto Gottardi para la restauración y el diseño en la calle San Ignacio del Centro Histórico, donde aconteció este jueves la primera actividad oficial promovida por la Oficina del Historiador en este maravilloso sitio de la vida social habanera, que honra la memoria del Historiador de la Ciudad, Dr. Eusebio Leal Spengler.

 

 

En sus palabras, Magda Resik precisó: “Leal siempre soñó con un espacio así, que favoreciera su predilección y pasión por la arquitectura cubana. Esa mirada tan auténtica y sensual defendida por nuestros expertos, arquitectos, diseñadores, que tomaron en cuenta el referente universal para potenciar las raíces de la arquitectura y el urbanismo nacional”.
Confirmó, además, la presencia de este legado en la existencia de muchas de las generaciones de arquitectos que participaron en la más reciente propuesta literaria de Choy-León en este Taller Gottardi, destinado a la difusión y el debate colectivo de la obra artística de estas mujeres y hombres a lo largo de la historia y la memoria arquitectónica.
También señalo Resik: “La labor de Leal es todo un desafío porque el equipo continuador ha sentido que en temas tan álgidos como los destinados a la conservación y restauración del patrimonio de la ciudad se requiere de un compromiso y un deber muy alto en cuanto a responsabilidad social. Eso provoca que la Oficina del Historiador haya desarrollado amplias y cercanas relaciones con la Asociación de Artistas de la Plástica de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), especialmente con su Sección de Arquitectura. Precisamente, esta última nos ha sugerido todo un debate intelectual para continuar apostando por la vanguardia de la profesión, junto a otras labores afines, en la definición y consenso de los tantos proyectos que la sociedad cubana emprende en la actualidad”.

 

 

El Director de la Editorial Aurelia, Carlos Torres Cairo, confesó en su intervención que fue todo un reto la producción de este libro voluminoso, que terminó involucrando a todos los autores en la monografía para que esta resultase una compilación maravillosa.
En este sentido, acotó la importancia de los croquis que aparecen en las páginas de este texto, como la evidencia inusitada de esa idea inicial, de donde parte el sueño más deseado del arquitecto respecto a su obra.
Cairo relató como el contexto de la Pandemia de la Covid-19 se convirtió en un muelle de energías positivas para hacer grandes y ambiciosos proyectos como este que vio la luz de las manos de Choy-León. Un proyecto que también contó con el apoyo de la Casa de las Américas, cuando abrazó en primera instancia la distribución permanente de este libro.
La experimentada estudiosa y pedagoga Dra. María Victoria Sardoya comentó en la presentación del volumen “Choy-León: obras y proyectos”, que este texto es todo un suceso en el universo de la literatura especializada, pues refiere un antes y después en la memoria de la arquitectura cubana.

 

 

“No existen publicaciones en Cuba como esta monografía que revisa con apremio y dedicación la obra de los más notables arquitectos italianos y cubanos en su huella más distintiva por todo el país”. Y más adelante sentenció: “La obra de Choy-León es de una variedad temática diversa, con un dominio extraordinario de las escalas, donde se destacan espacios tan plurales como el eje San Lázaro, el Centro de Estudios Ernesto Che Guevara, el Complejo Comercial La Puntilla y varias de las instalaciones hoteleras”.
Resalto, además, el prólogo a título de Nelson Herrera Ysla, quien declara con verosimilitud y franqueza en su mirada, la visibilidad exclusiva de una obra vanguardista que proyecta lo construido y lo soñado.
En ese matrimonio ideal de Choy-León está la muestra de 21 obras concluidas y 5 proyectos en ejecución que resultan ser ejemplos palpables de cómo lo ideal de una muñeca con finos trazos, puede ser materialmente consumida en el espacio físico más necesario.

 

 

José Antonio Choy agradeció el gesto de esta acogida de la Oficina del Historiador de la Ciudad para la presentación del texto y, en especial, de su directora Perla Rosales. También recordó las complicidades de muchos de sus colegas en el trabajo conjunto para lograr el éxito de este libro y cómo muchos de ellos han dejado una estela de percepciones y puntos de vista en la formación de las nuevas generaciones.
Choy dejó por sentado: “El futuro es una oportunidad para seguir soñando la arquitectura, que es igual a soñar la defensa de una ciudad donde pueden converger distintos estilos, variedad de diseños, como mismo poesía y compromiso con la sociedad”.

 

 

Perla Rosales, Directora Adjunta de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, también recordó este día a Eusebio Leal, quien fue testigo y autor de esta hermandad y cooperación entre Italia y Cuba como el nombre que lleva este bello espacio del Centro Histórico, el Taller Roberto Gottardi.
“Son muchas las anécdotas que atesora a su interior la familia Choy-León en su trayecto por la arquitectura; algunas de ellas, personalmente las conozco, pero no forman parte del contenido de este libro. De lo que se trata en cuestión, es mostrar la evidencia más precisa de un trabajo intelectual muy orgánico, peliagudo y extraordinario que recrea el sentido de una identidad por la profesión”, afirmó.
La Directora Adjunta de la Oficina del Historiador anunció la presencia de este equipo de trabajo Choy-León en uno de los espacios del Centro Histórico, para colaborar en los tantos proyectos que atiende la institución en la política social de la vivienda, y en otros relacionados con el urbanismo y la consignación de una ciudad inteligente.
El Agregado Cultural de la Embajada de Italia en Cuba, Excelentísimo Sr. Giulio del Federico, felicitó a los autores del libro y, en especial, a su obra arquitectónica. También agradeció a la Oficina del Historiador de la Ciudad por la invitación, y dijo: “Este encuentro es un punto de partida y de llegada de un proyecto de cooperación que comenzó en el año 2015 con la participación del Historiador de la Ciudad, Dr. Eusebio Leal, y nuestro gobierno de Italia, que defiende la importancia de la preservación de la huella italiana en el patrimonio arquitectónico cubano”.

 

 

Varios de los profesionales invitados hablaron del legado de esta familia de arquitectos que trasciende más allá de su especialidad al universo de la pedagogía en la formación de los nuevos discípulos, y en la contribución de los estudios de maestría y doctorado.
A la presentación del libro “Choy-León: obras y proyectos”, de Ediciones Aurelia, asistieron también directivos de la Oficina del Historiador, junto a arquitectos, expertos y artistas de la UNEAC.
La obra de Choy-León es el ejemplo de un futuro que nos queda por hacer en La Habana y en Cuba, como ese manifiesto imprescindible de un legado artístico a la manera de concierto sinfónico que sabe buscar en las esencias de la perfección, la virtud infinita de la imaginación y la poesía visual.