Emblema de la cultura cubana

29 de marzo de 2016

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Alexis Rodríguez García

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75 aniversario, Anfiteatro de La Habana, Centro HIstórico de La Habana, Cuba, Cultura, Teatro América

Fotos: Alexis Rodríguez

 

 

 

Este martes 29 de marzo, el Teatro de Variedades “América” celebra su 75 aniversario. Epicentro del Musical en La Habana, desde su inauguración en 1941 el coliseo de la céntrica calle Galiano, esquina a Concordia, atesora significativas páginas en la historia del quehacer cultural de la nación cubana. Relevantes figuras del ámbito internacional han pasado por ese escenario; solo bastaría mencionar a La Novia de América, Libertad Lamarque; al Acuarelista de la Poesía Antillana, Luis Carbonell; a La Única, Rita Montaner; a las vedettes Rosita Fornés y María de los Ángeles Santana; La Faraona, Lola Flores, y al Tenor de la Américas, Pedro Vargas, entre otros, para afirmar que el “América”, como popularmente lo denominan, es Templo de las Variedades y el Espectáculo Musical en Cuba.
Desde 2001, organizado por Jorge Alfaro, director de la Institución, la Dirección Provincial de Cultura y el Consejo Nacional de las Artes Escénicas, se desarrolla cada cinco años un Evento Teórico con el fin de promover y estimular la revitalización y recuperación del espectáculo musical con todo su esplendor en nuestro país. Recordados nombres como Esther Borja, Armando Suarez del Villar, Zenia Marabal y Héctor Quintero, han participado en estos eventos, que cada un lustro reúne a hacedores del espectáculo y el teatro musical.
Durante los días 23, 24 y 25 de marzo, la Casa de la Música de Galiano, a solo pasos del América, acogió la IV edición de la cita; en esta ocasión dedicada al Maestro Nelson Dorr y con el slogan ”El Espectáculo Musical en Cuba: sueños, esfuerzos y realidad”. Temáticas como El Carnaval de La Habana; El Bolero y el Humor como espectáculos musicales; cómo se aborda y qué tratamiento se le da a esta manifestación artística a través de la Televisión, en espacios abiertos y en centros turísticos; la enseñanza artística y su importancia en la programación infantil, fueron debatidos por especialistas como Virtudes Feliú, José Loyola, Ricardo Isidrón, Alexis Vázquez, Noel Torriente y Carlos Alberto Pucheaux, entre otros.

 

 

 

El reconocido director para la televisión Roberto Ferguson, abordó el mal uso de horarios y ubicación, en canales de televisión, de programas que tocan el musical desde diversas aristas: “canales donde incluso la señal llega con dificultad en el interior del país, donde precisamente está un público ansioso de ver y conocer lo que pasa en el mundo del espectáculo, ya que en sus provincias no les llega; en muchas ocasiones, espectáculos como los que acaecen en los escenarios de la capital. Espacios como Un Palco en la Ópera, Bravo, La Danza Eterna, por solo citar algunos, lo transmiten, además, compitiendo con las telenovelas y esto también afecta, pues todos sabemos que el cubano es ferviente seguidor de las telenovelas”.

 

 

Por su parte, José Ramón Artigas, otro de los grandes maestros de la dirección de programas musicales televisivos, expuso que si bien es cierto que las carencias económicas atentan con la producción de estos tipos de espectáculos, “con deseo y talento se pueden hacer puestas escénicas con dignidad y decoro”. Recordó Artigas cuando en pleno Periodo Especial, con la carencia a extremos que vivía la Cuba de los noventas, el Doctor Eusebio Leal le pidió que dirigiese la famosa zarzuela Cecilia Valdés, de Gonzalo Roig, en la Plaza de la Catedral, a propósito de la IX Cumbre de Países Iberoamericanos, que tendría lugar en La Habana en 1999 y que sin dudas se realizó con gran éxito: “Lo importante es la creatividad, tener las herramientas y el conocimiento, que son cosas que tienen que ir juntas y que, por supuesto, no se pueden improvisar. El director artístico tiene que tener dominio de su profesión, conocer de dramaturgia, de música; no puede ser un improvisado”.

 

 

Otro reconocido director de teatro musical, Alfonso Menéndez, quien ha subido a escena títulos como Cats, El fantasma de la ópera, El Rey León, El jorobado de Notre Dame y ahora, Aladino, habló de la importancia de que se reconozca el teatro musical como un buen arte, no como un arte menor dentro de las artes escénicas: “En Cuba siempre se ha hecho, y hoy por hoy se está haciendo muy buen teatro musical. En mi caso, en el Anfiteatro de La Habana; Alfaro, en el América; lo hizo Tony Díaz, que desgraciadamente no está ya entre nosotros. Eso que es caro o no, es hipotético, lo importante es que se haga y se haga bien. Ahora hay quienes piensan que el teatro musical es de menor cuantía y nosotros tenemos que batallar porque se reconozca la alta calidad del musical en nuestros días”.

Aunque marcado por el paso de los años, ahí está, elegante, con toda la majestuosidad del Art Decó, el Teatro de Variedades “América”, que para su onomástico 75, presenta en calidad de estreno en Cuba la revista musical Víctor Victoria, basada en el famoso espectáculo clásico de Broadway que ha recorrido todo el orbe. La puesta está dirigida por Raúl de la Rosa, y cuenta con las interpretaciones de la Compañía Musical Habana, el Ballet del Teatro América, y los actores Gretel Cazón, Yenet Cruz, Yenisey del Castillo, Marcos Medina, Raúl Aparicio, Orelvis Díaz, Miguel Fonseca, Carmita Ruiz, Maylín Tamayo y Leo Garrido.

Función especial el propio martes 29 de marzo a las 8 y 30 de la noche, y durante todos los fines de semana de abril, en sus horarios habituales de viernes y sábados 8 y 30 p.m. y domingos 5 de la tarde. El propio 29 de marzo la Banda Nacional de Concierto regalará, en los portales del propio Teatro, piezas de grandes musicales de Cuba y el Mundo.