Del cuerpo, la memoria y el arte chileno en el Premio Casa

31 de enero de 2014

Artes visuales, Premio Casa de las Américas

Por Eydi Sanamé Flores, estudiante de periodismo

Las artes visuales se integran también al programa de la 55 edición del Premio Casa de las Américas, razón por la cual dicha institución propone a público dos muestras de artes visuales que tienen en común su acercamiento a la creación latinoamericana.

En la sala transitoria del Edificio de Arte Universal del Museo Nacional de Bellas Artes, el visitante podrá apreciar la exposición Arte Chileno en colecciones cubanas, una variada muestra de obras en cuanto a tendencias, técnicas y forma de expresión, donde destacan nombres como el pintor surrealista Roberto Matta y la fotógrafa Paz Errázuriz.
La curadora Wendy Amigó Vega, especialista de artes plásticas de la Casa, explicó que el propósito de la exhibición es “agrupar diversas expresiones y estilos del arte de Chile a través de los artistas más representativos presentes en las colecciones cubanas.”
Desde el grabado, la cerámica, la instalación, la pintura, el dibujo, hasta el ensayo fotográfico y la fotografía documental, la exposición reúne además una pluralidad de miradas donde los creadores dialogan con culturas milenarias como la quinchimalí, la realidad social y su propia intimidad.
“Las preocupaciones sociales en las fotografías de Alejandro Hoppe, que retratan la violencia y la represión en las calles, la intención lúdica del colchón de Matta, y el juego con la intimidad mediante un ente tan personal como el colchón, hasta obras que tratan de reflejar el entorno, pueden encontrarse en la sala”, señala Amigó Vega.

Paz Errázuriz, artista invitada y cuyo trabajo se exhibe también en la selección fotográfica, declaró sentir mucha alegría al ver nuevamente una de sus célebres fotos pertenecientes a su ensayo sobre los boxeadores, serie donde Errázuriz desmitifica la rudeza y estoicidad de estos deportistas para revelar a “bellos muchachos comunes, como todos, persiguiendo su destino.”
Del cuerpo y la memoria… tres fotógrafas iberoamericanas
Esta segunda muestra, disponible hasta el 28 de marzo en la galería Latinoamericana dentro de la Casa, presenta la obra de la española Beatriz Ruibal, la costarricense Karla Solano y la brasileña Carmen Novo, todas evocando momentos cotidianos o trascendentales de su vida mediante objetos comunes devenidos símbolos a través del lente.
Tal es el caso de Beatriz Ruibal, quien con su serie Madre, honra la memoria de su familiar centrando en el encuadre objetos personales del ser ausente, aislados, coloridos y vivos, en contraste con el blanco y negro del fondo.
Esta “visión del objeto cual remanente” en palabras de la curadora Nahela Hechavarría, se extiende también a Carmen Novo y su proyecto Le petit musée de mon moi – la vie de choses.
“Novo apunta cómo cada objeto refiere diversos instantes de la existencia humana, el espacio doméstico, la memoria personal: “la vida de las cosas” que de conjunto va conformando esa idea de quiénes hemos sido o somos. Una visión antropológica que entiende al objeto como extensión del individuo, artefacto sensible, importante mediador en las relaciones humanas”, acotó Hechavarría en el plegable de la muestra.

Interesante en tanto simbólica y por su formato gigantesco, podría resultar también la pieza Raíces, de Karla Solano, quien es conocida por su fotografía efímera y la impresión en grandes dimensiones de fragmentos de su cuerpo en espacios públicos. Raíces, es un retorno a la tierra, tal vez, una emersión de ella.
Como concluye Hechavarría, “las tres artistas supieron encontrar ese no-lugar, sin tiempo, quizás aún en ciernes, que hace de la fotografía un territorio.”