Defender la cultura y el patrimonio

24 de julio de 2021

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26 de julio, Centro HIstórico de La Habana, Cuba, Eusebio Leal Spengler, Oficina del Historiador de La Habana, Patrimonio

Por: Odalys Viera y Yoel Lugones

 

 

En saludo al 26 de Julio, y como homenaje perenne de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (OHCH) a su eterno guía, el Doctor Eusebio Leal Spengler, fueron inauguradas en el Centro Histórico habanero varias obras que mantienen como premisa el objetivo fundamental de la institución: salvaguardar el patrimonio nacional.

 

 

En horas de la mañana de este sábado 24 de julio se realizó este recorrido, encabezado por Perla Rosales, Directora Adjunta General de la OHCH, junto con otros directivos de la propia Oficina, el cual comenzó en el Castillo de la Real Fuerza, donde ya están listas para abrir al público, cuando las condiciones epidemiológicas lo permitan, nuevas salas monográficas dedicadas a mostrar objetos valiosos encontrados en expediciones de arqueología marina y de nuestra historia naval.

 

 

Guiados por Antonio Quevedo, Director del Museo del Arqueología y del propio Castillo de la Real Fuerza – el cual quedó convertido en Museo de los Tesoros Sumergidos luego de la última restauración, gracias a un proyecto llevado a cabo por especialistas de la OHCH, que permitió restituir una serie de elementos desaparecidos y el funcionamiento del puente levadizo –, los nuevos espacios nos adentran en el mundo naval aborigen y en los primeros buques que se construyeron en la Isla por particulares interesados en la pesca, el cabotaje y el contrabando. Como fue explicado, las canoas utilizadas por nuestros indios variaban en sus dimensiones y eran alisadas por dentro y por fuera; el remo era en forma de paleta, y cerraba la caña una empuñadura transversal. En cuanto al segundo tema, en julio de 1515 el gobierno de la Isla, radicado en Santiago de Cuba, solicitó al rey recursos para la construcción de embarcaciones; las más tempranas autorizaciones para armar buques datan de diciembre de 1516.

 

 

Otras salas ya listas son las que acogen la maqueta en miniatura de la propia fortaleza y la que exhibe la última adquisición del Historiador de La Habana para el museo, el Santísima Trinidad – ambos sueños de Leal –. Como explicó Quevedo, en la primera se nos muestra una imagen del Castillo de 1691 – con la primera casa y la torre campanario –, junto con una cronología histórica lugar, mientras que en la segunda, están los anales de ese navío que se bota en La Habana en 1779 y llega a Trafalgar en 1805.

 

 

Perteneciente al Primer Sistema Defensivo del país, el Castillo de la Real Fuerza, construido entre 1558-1577, es uno de los máximos exponentes de la arquitectura militar colonial en América que conserva La Habana, y su nueva función permite dignificar, preservar y resaltar su permanente existencia. Inaugurado el 6 de junio de 2008 como museo, se puede apreciar, a su entrada, la escultura original de la Giraldilla – símbolo más antiguo de la ciudad –, así como la historia de la navegación, la arqueología subacuática y la construcción naval en Cuba. En su interior, los tesoros marinos encontrados en embarcaciones hundidas y rescatados con los trabajos de excavaciones arqueológicas, quedan expuestos para el disfrute de todos los visitantes.

 

El recorrido continuó por la Casa del Márquez de Arcos, donde también fue inaugurado el Museo de la Fotografía, contentivo de dos salas: la cubana y la universal. Según Gloria Álvarez, Máster en Gestión del Patrimonio y madre de este proyecto, las piezas del museo provienen de los fondos de la Fototeca Histórica de la OHCH, la cual atesora más de 180 000 imágenes que abarcan todas las tipologías fotográficas y muchos de los dispositivos utilizados para su obtención, cada uno con su historia.

 

“Estos espacios – nos dice la especialista – proponen una nueva mirada en tono a la gestión del patrimonio fotográfico y a la industria de la fotografía donde se expone la imagen que ha resultado de un proceso determinado que no siempre ha sido igual en cada época, y donde mostramos, asimismo, una cronología para comprender esa evolución”.

 

Y es que sin dudas, el arte fotográfico se ha convertido en un paradigma en la actualidad, a través del cual se sensibiliza a millones de personas que buscan una noticia o simplemente un recuerdo; pocos inventos han evolucionado tan rápidamente como la fotografía, concebida como una estrecha alianza entre el arte, la técnica y la ciencia, puesta al servicio de la historia.
Ya la Casa del Marqués de Arcos – uno de los palacios más bellos y majestuosos del Centro Histórico, que acoge el Liceo Artístico y Literario de La Habana –, abre una nueva galería visual para seguir enalteciendo el pensamiento y la obra cultural cubana y la identidad nacional.

 

 

Como parte del recorrido también se visitó una obra social en construcción: el SAF San Isidro, que atiende a personas de la tercera edad y otros habitantes de la comunidad. Esto es una continuidad del proyecto social que tiene la OHCH y del legado que nos dejó Eusebio Leal, el cual continúa el sistema de ayuda a la familia.

 

 

La obra se ha comenzado casi de cero, por lo que ha sido muy compleja, pero se ha realizado con un gran compromiso y entrega por parte del personal. Así nos los hizo saber Mario Almeida, joven trabajador, quien siente un gran privilegio y orgullo de poder trabajar en la Oficina y en este lugar que tiene una trascendencia social: “Por eso, esta obra es muy hermosa, porque ayudará a los más desfavorecidos. Saber que comenzamos a rescatar este inmueble que estaba en muy malas condiciones y que hemos aportado nuestro granito de arena a la gran obra que lleva a cabo nuestra institución, es sentir que seguimos el ejemplo de Leal y su obra, que tanto representa para nosotros los jóvenes”.

 

 

En horas tempranas de la mañana de este propio sábado, el Gobierno Provincial de La Habana también dejó inaugurado un tramo de la Calle G, en el Vedado habanero, donde en los últimos meses la OHCH venía realizando acciones de restauración.