Ángel Quintero con Sentimientos “wi-fi”

30 de noviembre de 2017

Texto y fotos: Alexis Rodríguez

 

 

“… y no hay distancia o lejanía ante los ojos
si el alma se conecta con amor…”

Nuevamente el Museo Nacional de Bellas Artes acogió el arte musical del cantautor Ángel Quintero, esta vez para homenajear al Movimiento de la Nueva Trova que este 2017 festeja su 45 aniversario. La pertinaz lluvia del último día de noviembre en La Habana no impidió que el público acudiera a la acogedora Sala Teatro del edificio de Arte Cubano de la emblemática institución. Pasada la siete de la noche dio inicio el concierto que Quintero quiso llamar Sentimientos wi-fi, en el que se interpretaron una veintena de temas – la mayoría de su autoría – con textos cargados de mucho filin; le cantó al amor, al desamor, a la nostalgia, a la vida.

 

 

“La existencia, el arraigo, el sentido de pertenencia a esta Isla, el amor con sus innumerables multiplicidades y el tiempo que me ha tocado vivir – el mejor porque es el mío – han sido temas recurrentes en mis canciones desde hace más de cuatro décadas”. Escribía así Ángel en unos breves apuntes que aparecen en el catálogo de mano realizado para el concierto.

 

 

 

Canción sin pedigrí, Entre el agua y la sed, Identidad, Bailando con Pitágoras y El Panga, piezas antológicas del repertorio de Quinteros, así como otras de reciente cosecha como: Flor de marabú y Sentimientos wi-fi regaló el trovador. Momento especial en el concierto fue cuando el anfitrión compartiera escenario con dos figuras de la música cubana, la trovadora Marta Campos y el virtuoso guitarrista y compositor Alejandro Valdés. Con la carismática Marta se unió para interpretar Para cantarle al amor y Alma y voluntad. Por su parte, Valdés acompañó a Quintero en el tema La idea y regaló dos de sus composiciones para guitarra. “He querido compartir este concierto con Marta Campos, raigal trovadora, criollamente cubana y querida amiga, junto a la que he transitado un largo trecho entre cuerdas y canciones, y con Alejandro Valdés, destacado guitarrista concertista, que se ha mantenido muy cercano a los que hemos hecho de la trova un sentido de vida”, apuntó Quintero.

 

 

 

Durante hora y media Ángel Quintero (La Habana, 1956) entregó su arte, esta vez, con una sonoridad mas acústica e intimista. El también fundador del Movimiento de la Nueva Trova en su quehacer fusiona ritmos cubanos y elementos del bolero y la guaracha; ha grabados cinco discos y ha paseado sus canciones por escenarios de Cuba y el mundo.

 

 

Ángel Quintero agradeció a personas e instituciones, que hicieron posible la realización de este concierto: al Centro Cultural Pablo de la Torriente Brau y sus directivos Víctor Casaus y María Santucho; a la Emisora Habana Radio y su directora Magda Resik junto al equipo de audiovisuales de la propia planta; al Centro Nacional de Música Popular y al Museo Nacional de Bellas Artes. Reconoció también a diseñadores, sonidistas y en especial a Teresa Sanabria, artista de la plástica, que realizó las plumillas que acompañaron, como telón de fondo, cada tema del espectáculo. Y por su puesto al público, entre ellos, a sus amigos: Vicente Feliú, Gerardo Alfonso, Augusto Blanca, Juan Carlos Pérez, entre otros trovadores.

 

 

Con el popular tema Solamente una ventana – que en la década de los ochenta popularizara la agrupación Moncada – interpretado por Ángel, sus invitados y los allí presentes, concluía el concierto “espero que estos Sentimientos que se cantaron hoy, los interconecten con nuestro universo wi-fi en el que todos somos Cuba… Gracias”, expresó Quintero.