Danza Teatro Retazos cautiva al público en otras latitudes
11 de abril de 2013
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Los últimos meses del año 2012 fueron muy exitosos para Danza Teatro Retazos, la Compañía que desde 1996 organiza el Festival Internacional de Danza en Paisajes Urbanos: Habana Vieja Ciudad en Movimiento.
La mezcla de fuerza y emoción que inunda el escenario en cada una de sus presentaciones cautivó al público más allá del Centro Histórico habanero. Obras hechas desde la sensibilidad y experiencia de los bailarines, donde se articulan cuerpo y corazón, acompañados por música y luces cuando es posible, han permitido a sus integrantes, durante más de un cuarto de siglo, conectarse con los espectadores dentro y fuera de Cuba. Las actuaciones en Bélgica, Italia y Argelia durante el 2012, demostraron una vez más el poder del lenguaje de la danza para conectar pueblos distantes.
El IV Festival Internacional de Danza Contemporánea de Argelia, celebrado del 15 al 22 de noviembre de 2012, donde el espectáculo Retazos en el tiempo impresionó al jurado y alcanzó el primer galardón de la competencia, fue uno de esos espacios donde la singularidad de la propuesta artística de Retazos ganó nuevos admiradores.
“Entre obras de 19 países donde había creaciones muy interesantes por el atractivo uso de la tecnología, nuestro trabajo marcó la diferencia debido a la sencillez de la puesta en escena y, a la vez, la comunicación que establecimos con el público. Siempre tratamos de adentrarnos en las personas e identificarlas con lo que hacemos, pues nuestra directora Isabel Bustos nos enseña a trabajar con lo espiritual, con aquello que cada uno lleva adentro. No buscamos el virtuosismo en elementos externos sino en nosotros mismos y esa manera de danzar asombra y maravilla a muchos”, asegura Danay Acosta, una de las primeras bailarinas de la Compañía, mientras rememora las tensiones y alegrías vividas en el país árabe donde las diferencias culturales se desvanecieron y dieron paso al lenguaje del cuerpo y la música.
También en Italia, la Compañía ganó los aplausos del público durante el Festival Oriente Occidente de Rovereto, en la provincia de Trento. Nuevamente la fuerza de las miradas y los movimientos, la combinación entre danza y teatro, pero sobre todo la defensa de un arte alejado de las tendencias de la moda que invaden el mundo danzario, conmovieron a un auditorio extranjero. Para Lázaro A. Batista, las presentaciones en Italia fueron reveladoras en cuanto a la relación con los espectadores: “En Rovereto fuimos ovacionados y aunque no intercambiamos palabras con el público, sentimos que les había gustado nuestro trabajo. Estamos acostumbrados a intercambiar impresiones con las personas y a escuchar sus opiniones, pero fuera de Cuba hay que saber interpretar las muestras de admiración que nos regalan y por eso en Italia vivimos una experiencia diferente y, a la vez, emocionante”.
Algo parecido había sucedido en Bélgica unos días antes, cuando los Retazos junto a otros bailarines del mundo asaltaron las calles de algunas regiones de Bélgica como parte del Festival Danse en ville, organizado por la compañía belga Irène K. Según cuenta la primera bailarina Alina Ramírez, en esa ocasión salieron a las plazas y paseos a improvisar y a presentar su danza a los caminantes: “Eran personas que iban de paso a su casa o trabajo y que no estaban enterados de lo que sucedería, algunos se relacionaban con nosotros y otros simplemente seguían su camino y mantenían la distancia, pero para nosotros en cualquiera de los casos fue un momento de crecimiento profesional en el ámbito personal y colectivo”.
Y es que Argelia, Italia y Bélgica significaron un descubrimiento, no solo de otras culturas sino también de la capacidad de enfrentar circunstancias tan diferentes en cada caso y hacerlo siempre desde el amor al arte. Esa manera de crear continuará diferenciando a una Compañía que esparce cada día sus Retazos de vida por Cuba y el mundo.
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