“Teatro Martí. Prodigiosa Permanencia”
19 de mayo de 2017
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El destacado intelectual cubano Reynaldo González, Premio Nacional de Literatura, presentó en la Sala Manuel Galich de la Casa de Las Américas, con su oratoria llena de preciosismo y elocuencia, el libro eminentemente ilustrado Teatro Martí. Prodigiosa Permanencia, de Nancy González Arzola, motivo de júbilo, para los asistentes, ya que esta institución, perteneciente al entorno habanero, atesora sangre de nuestra cultura.
El volumen, posee dos ediciones: la primera, agotada, es de Ediciones Unión, La Habana 2010 y la segunda, corregida y aumentada, ahora a disposición de los interesados, es de la Casa Editorial – Impretur, SRL – de República Dominicana 2016.
Con sus dos prólogos “El Teatro Martí, como el mar, siempre recomenzando” de Reynaldo González y “El renacimiento del Teatro Martí” de Cristóbal Díaz de Ayala, bautizado como “el padrino de la música cubana”; con los dos textos de su autora, para la primera y segunda edición respectivamente; así como con la reproducción fotográfica de Raúl Rodríguez, Premio Nacional de Cine y el tratamiento digital de imágenes y recortes del escritor y poeta Sigfredo Ariel involucrado también en la tarea, contribuyen a enriquecer este libro, convirtiéndolo en un testigo de amor a través de la palabra escrita, por más de un siglo, de la historia de la ciudad y el país. El teatro Martí, ubicado en la capital cubana, en la época en que se conocía como teatro provisional de verano, forma parte de la arquitectura colonial del siglo XIX.
Nancy González Arzola (Guanajay 1944), arquitecta, escritora, profesora, diseñadora de vestuario y escenografía, y directora de arte en la esfera cinematográfica, desplegó un amplio proceso investigativo para la creación de su obra, que se extendió por más de 25 años, hurgando “en la documentación original, los hallazgos arqueológicos encontrados en el propio teatro y los juicios técnicos derivados del estudio de la teoría teatral”.
Teatro Martí. Prodigiosa Permanencia, publicación desinteresada que dialoga con el lector a través de la ira, la pasión, la belleza, la alegría y la simpatía, enaltece la historia teatral cubana. Se trata de un encuentro con los artistas que por el Martí pasaron; con el público que en familia asistía; con los innumerables sucesos políticos y culturales que allí ocurrieron; con las biografías de los diferentes dueños que lo dirigieron, y con las crónicas que Julián del Casal, sobre “el coliseo de las cien puertas”, escribiera.
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