ribbon

Problemas sociales en la ciudad patrimonial (pobreza)

15 de abril de 2016

|

 

desigualdad_3

 

Los problemas sociales presentes en los Centros Históricos son variados. En esta ocasión se hará referencia a uno de ellos la pobreza que se relaciona con múltiples factores sociales entre los que se encuentran las dificultades para el acceso a la vivienda, la migración, las limitaciones para la inserción laboral y otros.

En los Centros Históricos de América Latina se concentra la pobreza social de la población residente con el sobre uso que hacen los usuarios que llegan diariamente. Ello se relaciona con la alta densidad de población, ya que los sectores más pobres se concentran en los espacios centrales de la ciudad que es dónde se permite un uso intensivo del espacio.

Esta situación provoca exclusión social, degradación del hábitat y condiciones precarias en el empleo, con la tendencia a la informalización y altas tasas de desempleo. Ejemplo de ello es que en el Centro Histórico de Quito, Ecuador el 65 % de la población vive en condiciones de pobreza.

Otro de los fenómenos más serios que se presente es la marginación. Esta genera no solamente la decadencia del centro sino también un creciente aumento de poblaciones vulnerables constituidas en forma creciente por los grupos de pobreza urbana.

El creciente prestigio de algunos centros históricos llevó a la promoción de venta y compra de lotes o construcciones con la posibilidad de vivir en un lugar histórico y con tradición. Esta situación provocó un aumento en las restas del suelo y tuvo como efecto el desalojo de los habitantes nativos del centro, que constituía la población de menos recursos económicos y el incremento de la densidad de uso de los soportes materiales por la vía de la tugurización.

Toda esta situación de tugurización y gentrificación ocurren como consecuencia de varios aspectos entre los que se encuentran:
• Deterioro de los inmuebles por antigüedad,
• Casi nula inversión de los propietarios,
• Liquidación de la oferta de vivienda en renta,
• Cambios de uso del suelo (Viviendas sustituidas por comercios, bodegas y oficinas,
• Degradación del entorno urbano,
• Búsqueda de la propiedad de la vivienda (en las áreas periféricas)
• Ausencia o falta de continuidad de los programas de regeneración habitacional.

Entre la pobreza, la alta densidad poblacional y la marginalidad existe un círculo vicioso, una conduce a la otra y así sucesivamente, resulta difícil salir de él solo con la intensión. La solución a estos problemas conduce a cambios más generales en el sistema económico-social y la generación de políticas sociales que sean inclusivas, al propiciar el beneficio de todos los ciudadanos y de manera directa aquellos que se encuentran en estas situaciones límites. Ellas deben aplicarse de manera general en la nación, en las ciudades y de manera especial en los centros históricos para lograr la aplicación de acciones de restauración y rescate del patrimonio de manera integral.

Galería de Imágenes

Comentarios