ribbon

Más sobre liderazgo

6 de junio de 2014

|

curso_team_building_gestion_liderazgo_onlinePara seguir con el tema del liderazgo y sus cualidades, voy a continuar hablando de otros atributos que debe tener quien dirige, o sea, un líder, porque la semana pasada hablaba desde la postura del subordinado, pero me di cuenta que también hay que ver este asunto desde la perspectiva de quien dirige, ya que mis lectores —que como siempre digo, espero que sean  muchos—  también deben ser jefes, directivos, gerentes, en fin, que ejercen la función de dirigir a grupos de personas en un ámbito laboral, por lo que ya les digo que además de lo que ya hablé, hay otras cualidades que deben poseer como son la capacidad para resolver conflictos, ser conocedor de la actividad que se realiza, ser capaz de usar el asesoramiento individual y colectivo de quienes más conocen en alguna área en particular, buscar consenso, resolver los asuntos en colectivo, dándole voz a todos, sin desechar ideas que pueden servir en otro momento, porque es imposible que alguien sea experto en todo, ver a sus subordinados como seres humanos que tienen una vida personal y los problemas que esto puede conllevar. Aquí me detengo y me dirijo a las mujeres en particular (sin que los hombres dejen de leer) ya que estoy segura que muchas hemos oímos o hemos sufrido esa postura de “a ella no la contratamos o no le damos tal trabajo porque tiene hijos o es joven y seguro que va a parir y eso complica todo ya que los niños se enferman y ya saben lo que puede pasar”, con lo cual una se pregunta: ¿Es que él nació de una incubadora? ¿Acaso inventó una nueva forma de tener hijos, tal vez fabricándolos en un taller y lo ha puesto en práctica en su matrimonio?
Con este ejemplo lo que quiero decir es que el jefe debe también tener la capacidad de afrontar de manera efectiva los mil y un conflictos que tiene la vida de cada uno de sus subordinados, sin enojarse, sino buscando caminos y dándole la oportunidad que su trabajador no se sienta traidor porque se hizo un esguince en el tobillo y tuvo que dejar de trabajar tres semanas, sino que se sienta apoyado ante los inconvenientes de la vida, y de aquí derivamos a la empatía, que como ya saben es la capacidad de entender las emociones de los demás, interpretar las señales no verbales para lograr una sintonía emocional, o sea, validar que es justo y entendible lo que el otro siente. Y aquí tengo otra historia, porque un amigo que dirige un departamento tiene un subordinado que fracasó al realizar una tarea laboral y esto le provocó un nivel de frustración tan elevado que presentó su renuncia, y este amigo me contaba que aún cuando le parecía una sobre-reacción desmesurada y que no solucionaba el problema sino que lo agravaba, le dedicó varias horas de conversación para establecer un flujo de entendimiento y comprendiera donde habían estado  los errores y que la huida no era la solución, sino que estaba en el análisis de los errores, lo cual podría ser inicialmente molesto desde lo emocional; pero en la medida que se adentrara por el camino de la solución de los errores, las emociones positivas irían apareciendo, con lo cual este líder puso en práctica un conjunto de atributos muy útiles para lograr el éxito en su gestión que fue desde la comprensión y aceptación de rasgos individuales de un subordinado hasta establecer vínculos con otros trabajadores que participarían en un trabajo colectivo; o sea, lograr cohesión para guiar a su colega, sin críticas cortantes, ni lástima, ni sarcasmo, porque todos sabemos que una expresión emocional de subestimación puede ser muy dañina, y a la corta o a la larga todos nos equivocamos y necesitamos ayuda y a nadie le gusta inspirar lástima.
Para terminar, les digo que para dirigir hay que tener un conjunto de destrezas importantes y algunas pueden aparecer temprano en la vida y otras se aprenden, pero todas se entrenan para mejorarlas. Es obvio  que todas tienen que ver con nuestra personalidad, nuestros recursos, de quienes somos y no todos somos capaces de dirigir aunque queramos, lo cual debe ser algo que debemos saber muy bien, ya que en ocasiones los cantos de sirena de “ser el jefe” con las prebendas que esto trae, enturbian las mentes y hace que algunos “burros” ocupen posiciones de poder que solo traen desánimo y más desánimo.

Galería de Imágenes

Comentarios