Las albóndigas de pollo

30 de septiembre de 2020

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Ivette Sedeño Cruz

 

 

Las albóndigas de pollo son un plato lleno de intensidad y magia, pues se vuelven mágicas acompañando muchas preparaciones y haciéndolas mucho más nutritivas. Se preparan con carne molida, especias para dar sabor y con aglutinante o no se hacen perfectamente, sobre todo si se usa pechuga de pollo. El aglutinante usado por excelencia es el huevo o pan remojado en leche. Generalmente se acompañan con diferentes tipos de salsa según preparación que le da una terminación perfecta a la misma.

El pollo es una carne blanca con poca grasa y muchas proteínas. Su aporte al organismo es principalmente de proteínas de alto valor biológico que ayudan a la formación de nuevos tejidos del organismo. Además, desarrollan los músculos y evitan la pérdida de masa ósea. El pollo contiene otros nutrientes, como ácido fólico, que protege las células sanas del cuerpo.

Las albóndigas se pueden acompañar con pastas, arroz blanco, papas asadas o fritas o simplemente una ensalada de vegetales.

Ingredientes:

½ kg de pechuga de pollo molida en un multiprocesador
50g de pepinillos o alcaparras
½ cdta de comino molido
½ cdta de orégano en hoja seco
2 dientes de ajo
Sal al gusto
1 huevo
Miga de pan
Leche

Para la salsa

1 cebolla
1 pimiento verde
1 pimiento rojo
2 cucharadas de tomate concasé
Un toque de albahaca
1 hoja de laurel
1 taza de caldo de pollo previamente elaborado

Procedimientos:

Remojar la miga de pan junto con la leche hasta que se humedezca. Poner todo en el multiprocesador para cortar la carne de pollo y mezclar junto con todos los ingredientes. Amasar todo hasta que tenga consistencia para formar bolitas del tamaño deseado. Calentar una sartén con aceite. Cuando esté caliente, freír las albóndigas hasta que estén doradas. Poner en un papel absorbente y reservar.

Para preparar la salsa, freír en una sartén o cacerola con aceite la cebolla cortada finamente. Cuando se empiece a dorar, agregar los pimientos cortados en trozos pequeños, añadir el tomate concasé. Agregar la taza de caldo de pollo, poner un toque de orégano y una hoja de laurel.

Cocinar durante 10 minutos o hasta que la salsa tenga la consistencia deseada. En caso de ser necesario, espesar con una cucharadita de maicena diluida en una cda de vino seco.

Cuando esté hirviendo agregar las albóndigas y dejar cocinar durante 15 minutos a fuego lento para que se cocinen bien las albóndigas de pollo.