La vejiga natatoria de los peces
10 de mayo de 2019
|
La vejiga natatoria es un órgano interno que contribuye a la capacidad de un pez de controlar su flotabilidad y así permanecer en una posición en el agua, ascender o descender sin tener que gastar energía en nadar. A menudo está ausente en peces que nadan muy rápido como las familias del Atún y la Caballa. También, muchos peces depredadores no la poseen, es el caso de los tiburones y las mantas.
La vejiga natatoria es un órgano de flotación que poseen muchos peces óseos. Es una bolsa de paredes flexibles, llena de gas, situada dorsalmente por debajo de la columna vertebral y por encima del tubo digestivo. Controla la flotabilidad del pez mediante un complejo sistema de intercambio gaseoso con la sangre, y permite al animal ascender o descender en el agua sin necesidad de utilizar los músculos.
¿Cómo funciona? Cuando la vejiga expulsa gases por compresión muscular, aumenta el peso específico, facilitando el descenso del pez en el agua. Pero si se llena de gases, entonces se favorece el ascenso del pez hacia la superficie.
¿Cómo se produce el gas? El proceso de secreción gaseosa se basa en la acidificación de la sangre producida al convertirse la glucosa en ácido láctico. Con ello, se libera en la sangre oxígeno de la oxihemoglobina y dióxido de carbono del bicarbonato sódico, que difunden en la vejiga natatoria. Los gases que no llegan inmediatamente hasta la vejiga natatoria pasan a la red a través de los capilares eferentes, y difunden desde allí al sistema aferente
La ausencia de vejiga natatoria le brinda a los peces que no la poseen la ventaja de poder moverse y sumergirse rápidamente a diferentes profundidades, mientras los peces con vejiga están limitados sólo hasta cierta profundidad debido a que la presión hidrostática aumenta con la profundidad, lo que hace que el líquido de la vejiga disminuya, esto no es tan grave, pues hasta con una vejiga completamente comprimida, el pez pesa solo ligeramente más que el agua, pero, al ascender, la vejiga se expande, entonces el pez tiene que nadar activamente hacia abajo, de lo contrario subiría hasta una altura crítica donde perdería el control.
La evolución de la vejiga natatoria en los peces. Los peces modernos lograron desarrollar una habilidad particular para flotar a determinados niveles marinos por medio de una vejiga natatoria llena de gas.
Muchos investigadores creen que la vejiga natatoria evolucionó a partir de un pulmón primitivo, al que se le pudo seguir la pista hasta remontar unos 400 millones de años hacia atrás en el tiempo. Unas proteínas especiales de la sangre, esenciales para la secreción de oxígeno, ya estaban presentes en el sistema ocular de los peces 250 millones de años atrás. Precedieron pues en unos cien millones de años a la vejiga natatoria. Estas proteínas especiales de la sangre influyeron en el desarrollo de la vejiga natatoria.
Otras funciones de la vejiga natatoria. En los últimos años, se detectó que la vejiga natatoria posee pelos extremadamente largos, que sirven de protección contra las bacterias.
Además, en ciertas especies de agua dulce realiza funciones de audición.
Recordemos que… “la Naturaleza inspira, cura, consuela, fortalece y prepara para la virtud al hombre”. Sólo hay un modo de que perdure: respetarla y servirla.
Galería de Imágenes
Comentarios