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La marca de lo humano en el objeto libro

5 de junio de 2018

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El arte de Flavia Fuentes Delgado –en opinión de la Doctora en Ciencias sobre Arte Carina Pino Santos– es, desde un inicio, narrativo, busca una animosidad y ello la insta a una poética literaria que nace a partir de la creación visual.

Así afirmaba la reconocida investigadora en la presentación, en la Librería Fayad Jamís, del libro-arte Publicación, preparado por Fuentes Delgado como trabajo de curso en el Instituto Superior de Arte.

En Publicación se encontrará una colección de dedicatorias, que la creadora ha separado de los libros en que aparecieron originalmente, volúmenes encontrados, en su mayoría, en librerías de segunda mano.

 

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“La artista –también en palabras de Carina Pino Santos– convierte el uso de la copia, y la estrategia de la apropiación, en una indagación sensible de la marca de lo humano en el objeto libro, algo que caracteriza la obra de Flavia”.

Publicación –explicaba– nos remite a algo muy común en nuestros días, que es el cotidiano acto de copiar y pegar de Internet, algo que puede ser incómodo o no ético y que, en otros momentos, permite trabajar con la información.

“La actualidad de esta acción –concluía la también crítica de arte–, que en otros casos ha sido llamada plagio, es adoptada ahora por Flavia resignificando conceptos de lo íntimo, lo privado y lo público”.

Actual estudiante de la Facultad de Artes Visuales del Instituto Superior de Arte, Flavia Fuentes Delgado, nacida en La Habana, en 1995, es graduada de la Academia de Artes Plásticas San Alejandro en el año 2015.

 

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Su primera exposición personal, Brahmanda, era presentada en el año 2016 y ha participado en más de una decena de colectivas, entre ellas Libros sin dominio, exhibida en la propia Librería Fayad Jamís durante la XII Bienal de La Habana 2015.

Durante la presentación del libro-arte Publicación, Flavia Fuentes Delgado agradecía a quienes colaboraron en este proyecto, que se inscribe dentro de una tendencia en la escritura contemporánea conocida como “patchwriting”.

Explicaba, asimismo, los propósitos que la animaron en este empeño, así como la manera en que confeccionó manualmente los cien ejemplares distribuidos, de manera gratuita, a los asistentes al encuentro.

Un empeño sustentado en su interés por los libros, a los que considera “una parte importante de mi obra, porque recogen lo que sucede, aunque esté enmascarado con otros personajes; al final, siempre implica a mi historia personal”.

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