La fortaleza de una clase obrera

1 de mayo de 2015

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Nadia Herrada Hidalgo

 

A pesar de la lluvia que azota por estos días la capital cubana, cientos de trabajadores desfilaron ante la Plaza de la Revolución para celebrar juntos, “Unidos en la construcción del Socialismo”, el Día Internacional de los Trabajadores.
El Presidente cubano, General de Ejército Raúl Castro Ruz, acompañado de Nicolás Maduro Moros, presidente de la hermana República Bolivariana de Venezuela, presidió la marcha. Por vez primera, después de muchos años de ausencia en territorio nacional, los Cinco Héroes Cubanos iniciaron el tradicional desfile por el día del proletariado mundial. Luego de 16 años de injusta condena en cárceles de Estados Unidos compartieron la alegría de esta gran fiesta junto a familiares, amigos y pueblo en general. Asimismo, participaron representantes de 28 países de de América Latina y 68 de todo el mundo.
El discurso de Ulises Guillarte de Nacimiento, Secretario General de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) marcó el comienzo de la marcha alrededor de las 7 y 20 de la mañana en la capital. Según sus palabras “la clase obrera cubana junto a todo nuestro pueblo tiene argumentos y razones suficientes para festejar este hermoso día. Columnas de trabajadores, intelectuales y combatientes marcharán por nuestras avenidas respaldando al Gobierno, al Partido, a Fidel y a Raúl”.
Guillarte  manifestó la solidaridad de Cuba con Venezuela. “Estamos aquí también en defensa del pueblo venezolano y nos honra con su presencia Nicolás Maduro Moros, presidente venezolano y le ratificamos los pronunciamientos del compañero Raúl, cuando dijo en Panamá: Reitero la firme solidaridad con la Revolución Bolivariana, con Maduro, la fuerza cívico-militar y la memoria de Hugo Chávez, el mejor amigo de la Revolución Cubana. La paz que reclama Venezuela es la paz de pie y no de rodilla. La Revolución Bolivariana tiene el apoyo de la mayoría del pueblo y el apoyo de otras regiones del mundo. Reclamamos su estabilidad, su soberanía y su autodeterminación”.
“Saludamos la presencia de centenares de amigos de diferentes organizaciones, movimientos sociales y grupos de solidaridad a los que reitero el agradecimiento de nuestros trabajadores y de nuestro pueblo. Ratificamos el mensaje de solidaridad con los trabajadores que en el mundo son símbolo de amistad y luchan a diario”, aseveró.
“Saludo igualmente a todos los jóvenes continuadores de la obra de la Revolución y que son protagonistas del trabajo, el estudio y la defensa. A las mujeres que son mayoría en algunos sectores y creadoras de un mundo mejor. Al recuerdo de Mariana Grajales, madre de los Maceo”.
Además el Secretario General de la CTC explicó que el lema “Unidos en la construcción del socialismo” es el resumen de nuestra decisión, de la fortaleza de una clase obrera en el poder, clasista y unitaria, que levanta las banderas por la paz, la solidaridad y hermandad entre los pueblos. Marchemos unidos con la seguridad en la victoria definitiva. Vivan Fidel y Raúl”, concluyó.
El desfile de este primero de mayo inició con más de 50 mil trabajadores de la Salud Pública, entre ellos un centenar de colaboradores de la Brigada Médica Internacionalista Henry Reeve, quienes desde octubre del pasado año combatieron la epidemia del Ébola en África Occidental. El ejército de batas blancas estuvo integrado por médicos, enfermeros, técnicos, especialistas, personal de servicio y estudiantes universitarios de esa profesión.
En total, desfilaron, en una marcha colorida y compacta, 17 sindicatos de trabajadores de todos los municipios de la capital cubana. Al primer bloque le siguieron los de Educación, la Ciencia y el Deporte, Construcción, y el de Comunales. Continuaron los de Comunicaciones, la Ciencia, Civiles de la Defensa, Hotelería y Turismo, Industrias, Transporte, Administración Pública, los de Comercio, Gastronomía y Servicios y Tabacaleros, Cultura, Alimentación y Pesca, Azucareros, Agropecuario y Energía y Minas.
Los últimos bloques estuvieron integrados por las nuevas generaciones. Más de 50 mil jóvenes, protagonizaron la histórica jornada. El bloque estuvo encabezado por 700 deportistas preseleccionados para los Juegos Panamericanos de Toronto 2015.
Seguidamente, marcharon  miembros de la Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media y universitarios. Mientras que los jóvenes trabajadores y combatientes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y del Ministerio del Interior cerraron el gran desfile en la capital cubana. Esta jornada estuvo marcada por la lluvia, pero el agua no impidió que los trabajadores cubanos celebraran con júbilo y alegría el Día Mundial del Proletariado.