La calle de Compostela

15 de febrero de 2013

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Zenaida Iglesias Sánchez

El por qué de su nombre lo debe al Obispo Diego Evelino de Compostela quien tuvo a su cargo la construcción de las iglesias que se levantaron en su recorrido y porque además se estableció y radicó en ella, en la casa marcada con el número 155 en el siglo XIX, propiedad del monasterio de Santa Teresa, actual número 801; el Obispo estuvo enterrado en una urna que se conservó en el interior del propio monasterio, el mismo que se ubica en las calles de Compostela y Teniente Rey, hoy en obras de restauración por parte de nuestra institución.

La calle se llamó antes de San Diego, por la ermita de este nombre que se hallaba donde se construyó luego el magnífico edificio del convento de Belén; algunas de sus esquinas tomaron nombres peculiares relativos a algún accidente que en estas destacara, o alguna personalidad que allí se distinguiera, por ejemplo, la esquina de Amargura y Compostela se llamó del Mallorquín, porque la casa que aquí hacía esquina fue construida por el Sr. D. Juan Pascual, conocido por con este apodo.

Se extiende de Norte a Sur, desde la significativa loma del Ángel donde toma curiosa perspectiva hasta la avenida portuaria, siendo notable su extensión. En su recorrido sobresalen edificios construidos en distintas épocas, ejemplos de la arquitectura colonial cubana de los siglos XVII, XVIII y XIX, algunos emblemáticos en la arteria, como la farmacia del Dr. Sarrá; el referido monasterio de Santa Teresa con su iglesia adjunta y el también citado convento de Belén; un importante conjunto de construcciones domésticas que pertenecieron a las capas altas de la sociedad de entonces, como el Palacio Zuazo, comercios y el edificio del Archivo Nacional de Cuba.

Los trabajos de recuperación que se vienen ejecutando en el eje vial centenario han quedado enfocados a edificios puntuales con importante valor histórico y arquitectónico, mucho queda por hacer para recuperar su pavimentación y redes, pero se trabaja ininterrumpidamente para que en un futuro la calle Compostela gane la imagen que merece.