Juzgar la memoria

16 de abril de 2013

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Fernando Rodríguez Sosa

Existen acontecimientos que trascienden en el tiempo, para convertirse en hitos de toda una época. Son esos hechos que logran marcar, o hasta cambiar, el rumbo de la historia de la humanidad. Sucesos, por ello, que merecen ser recordados para mantener viva la memoria del mundo.

La victoria del pueblo cubano en Playa Girón ante el ataque mercenario yanqui, en abril de 1961, y la crisis que, en octubre de 1962, colocó al mundo al borde de una guerra termonuclea de incalculables consecuencias, son dos de esos momentos que han quedado como referencia imprescindible del calendario del mundo de la segunda mitad del siglo XX.

La publicación ahora de 50 años después. Girón y la Crisis de Octubre (Ediciones Imagen Contemporánea, Casa de Altos Estudios Don Fernando Ortiz, Universidad de La Habana, 246 pp) propone una enriquecedora relectura, desde nuevas miradas y perspectivas, a  ambos acontecimientos.

Con los ensayos y artículos reproducidos en este volumen –en opinión de Luis M. de las Traviesas Moreno, quien ha tenido a su cargo la selección de los textos— “medio siglo después, motivamos otra vez el repensar en la memoria histórica, legada con vivencias de combate y conciencia nacionales”.

Se abre esta entrega con la conferencia que, sobre las acciones combativas de 1961, uno de los principales protagonistas del triunfo en las arenas de Playa Girón, José Ramón Fernández Álvarez, ofrecía el 16 de junio del 2006, en la Cátedra Club Martiano Faustino Pérez, de la Universidad de La Habana.

Junto a tan valioso testimonio, aparecen las consideraciones de José R. Herrera Medina y Héctor Argilés Pérez acerca de la victoria del pueblo en abril de 1961, las reflexiones de Carlos Lechuga Hevia sobre la Crisis de Octubre y los estudios en que Rafael Hernández presenta las lecciones de la Crisis de Octubre y las relaciones cubanas con Estados Unidos.

Jacinto Valdés-Dapena Vivanco profundiza, por su parte, en la propaganda radial anticubana como instrumento de las acciones y las operaciones de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos entre 1960 y 1980, mientras que María Luisa Pérez López de Queralta analiza las variaciones ideoestéticas sobre la presencia de la Crisis de Octubre en la producción literaria de la isla.

Varios anexos sirven de complemento a la información ofrecida en las páginas de 50 años después. Girón y la Crisis de Octubre, entre ellos comunicados oficiales emitidos en abril de 1961, durante la invasión enemiga por Playa Girón, y fragmentos de la comparecencia radio-televisada del Comandante en Jefe Fidel Castro, el 1º de noviembre de 1962.

Historiar es juzgar. Certeras palabras del Héroe Nacional José Martí que, más de un siglo después de haber sido escritas, bien pudieran presentar esta selección de textos sobre dos hitos de la historia no solo cubana y latinoamericana, sino también del mundo de la pasada centuria.

Porque los lectores de 50 años después. Girón y la Crisis de Octubre podrán, mediante estos textos, estudiar, analizar, comentar, reflexionar, sobre el alcance y la trascendencia de dos páginas imprescindibles de la historia. Una manera, indudablemente, de conocer, pensar, prever, juzgar, la memoria de la humanidad.