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Julia Howe

30 de agosto de 2017

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Abolicionista, a favor del sufragio femenino, conferencista y autora de varios libros, la norteamericana Julia Howe es uno de esos personajes un tanto olvidados que se detuvo en Cuba y sobre ella escribió. Su libro A Trip to Cuba (Un viaje a Cuba), se publicó en Boston en 1860 y se nutría de una serie de artículos previamente publicados en Atlantic Monthly, lo cual nos revela la faceta periodística de su autora.

Julia Howe nació en 1819, por lo que contaba 40 años cuando emprendió la excursión turística que la condujo a Nassau, en Bahamas, y a Cuba. La antecedía su notoriedad como activista de los derechos de la mujer y su condición de dama culta –dominaba cinco idiomas– y acaudalada, pues era hija de un banquero. Durante algunos años codirigió junto a su esposo médico –que también a Cuba la acompañó– el periódico antiesclavista, El Commonwealth.

El matrimonio zarpó de Nueva York y llegó a La Habana en el vapor Karnak. Además de la capital, visitó la ciudad de Matanzas y el entonces poblado de San Antonio de los Baños, renombrado por las virtudes de sus aguas medicinales.

Los comentarios que Julia Howe expresa en su libro son de interés. Resultan evidentes sus críticas a las autoridades españolas, a la esclavitud lógicamente, y hasta a los cubanos mismos en ocasiones. Se conoce que conversó con el educador cubano José de la Luz Caballero, que visitó la Universidad, el café La Dominica, se detuvo en ingenios y cafetales, y opinó acerbamente sobre las condiciones de alojamiento y comodidades de los hoteles habaneros.

Fue una viajera observadora y dejó apuntes muy positivos:

“De las grandes sumas de dinero que el gobierno recibe a través de impuestos directos e indirectos poco o nada revierte al pueblo en forma de mejoras. El gobierno no hace caminos, ni establece escuelas, ni reforma a los criminales, ni extiende su fuerte brazo para impedir las ofensas de una juventud ignorante y depravada. Los caminos, por consiguiente, son pocos y peligrosos, siendo posible atravesar una gran parte de la Isla tan solo a caballo. Poca o ninguna instrucción se ofrece a los niños de las clases más pobres, y las prisiones son abominables por la suciedad, la desnudez y todos los tipos de desórdenes”.

El Himno de batalla de la República que esta mujer compuso en 1862, una vez musicalizado, se convirtió en una de las canciones más populares de las fuerzas de la Unión durante la Guerra Civil, y en 1870  proclamó ella por vez primera el Día de las Madres. Fue la primera mujer en acceder a la Academia Norteamericana de Artes y Letras, en 1908. Julia Howe murió a los 91 años, el 17 de octubre de 1910.

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