José Martí en la Revista Universal de México

13 de julio de 2018

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Víctor Pérez-Galdós Ortíz

 

 

José Martí publicó en la Revista Universal de México durante algo más de un año, entre 1875 y 1876 una cantidad de trabajos en los que hizo referencia a temas muy diversos, tanto de carácter político como de tipo cultural.

En el primer trabajo suyo reflejado en dicha publicación mexicana comentó acerca del homenaje que se le había tributado al patriota Miguel Hidalgo.

Se refirió a la propuesta que había hecho Francisco Rodríguez, a quien catalogó como un hombre anciano y una voz tranquila, sobre la construcción de un Monumento a la memoria inmortal de Miguel Hidalgo. El Congreso mexicano había aprobado esa propuesta.

En sus materiales por lo regular solía hacer breves comentarios en relación con cuatro ó cinco aspectos. Por ejemplo en el publicado en la edición del 11 de mayo de 1875, Martí trató también en relación con el papel de la literatura y el teatro.

Sobre la literatura destacó que es la bella forma de los pueblos y precisó además un principio de gran importancia al enfatizar: “Con pueblos nuevos, ley es esencial que una literatura nueva surja.”

Con respecto al teatro expresó que éste es copia y consecuencia del pueblo y añadió de inmediato: “Un pueblo que quiere ser nuevo, necesita producir un teatro original”

Martí igualmente resaltó la trascendencia de los ancianos en otros de los trabajos reflejados en la Revista Universal. Él manifestó que se tiene como una garantía de consuelo en las palabras de un honrado anciano.

Estableció un paralelismo entre el modo de hablar de un joven y el de un anciano y dijo que cuando habla un joven, el alma recuerda dónde se enciende su vigor y cuando lo hace un anciano, el alma descansa, confía, espera, sonreiría si tuviera labios, y parece que se dilata en paz.

Aseguró que la ancianidad es sublimemente sintética y que habla como los pueblos antiguos, en frases cortas, con grandes palabras.

Y en un trabajo publicado en la edición de la Revista Universal del 15 de mayo de 1875, Martí afirmó al referirse a los ancianos y cómo debían ser atendidos y tratados puesto que expuso: “No hay cosa más bella que amar a los ancianos; el respeto es un dulcísimo placer…”

Martí en sus trabajos en la Revista Universal también planteó criterios de singular relevancia en relación con los pueblos. Señaló el 25 de mayo de 1875 que un pueblo no es una masa de criaturas miserables y regidas y que no tiene el derecho de ser respetado hasta que no tenga la conciencia de ser regente.

Y agregó seguidamente: “Un pueblo no es independiente cuando ha sacudido las cadenas de sus amos; empieza a serlo cuando se ha arrancado de su ser los vicios de la vencida esclavitud, y para patria y vivir nuevos, alza e informa conceptos de vida radicalmente opuestos a la costumbre de servilismo pasado, a las memorias de debilidad y de lisonja que las dominaciones despóticas usan como elementos de dominio sobre los pueblos esclavos.”

Y entre los temas tratados por él en sus trabajos en la Revista Universal de México igualmente estuvo la situación de los indios en dicho país. Acerca de ello se refirió en la citada publicación en la edición correspondiente al 29 de julio de 1875.

Significó: “Más que otra alguna reclama cuidados esa raza olvidada y sin ventura, masa humana de tal manera viva, que no pueden los que la forman hacer oficio y obra útil de hombres.”

Detalló que no les permitía su vida atender un número de necesidades y que para ellos la aspiración era afán desconocido e inútil y que la indolencia en el trabajo era natural consecuencia de la indolencia en el espíritu y que un peligro grave constituía el resultado de ese abandono, de ese extravío, de esa pequeñez de tantos seres.

Acerca de la situación de los indios en México volvió a tratar Martí en otro de los materiales que publicó en la Revista Universal, en este caso el 14 de septiembre de 1875. En dicho trabajo expresó: “No quiere el boletinista hablar de cosas tristes, por más que sea para el día oscuro el día en que ve vagando por las calles grupos acusadores de infelices indios, masa útil y viva, que se desdeña como estorbo enojoso y raza muerta.”

Fueron muchos y muy variados los trabajos que Martí publicara entre mayo de 1875 y agosto de 1876 en la Revista Universal de México, en algunos de los cuales por ejemplo, hizo referencia a aspectos relacionados con la trascendencia de la educación.

En este sentido señaló en la edición del 21 de octubre de 1875, en un trabajo titulado El proyecto de instrucción pública, los artículos de la fe, la enseñanza obligatoria: “Cuando todos los hombres sepan leer, todos los hombres sabrán votar, y, cuando la ignorancia es la garantía de los extravíos políticos, la conciencia propia y el orgullo de la independencia garantizan el buen ejercicio de la libertad.”

En México puede decirse que José Martí adquirió una gran experiencia que mucho le representó para su consagración posterior en el campo del periodismo, sobre todo a partir de inicios de la década de los años ochenta, en el siglo XIX, cuando desde Nueva York empezó a elaborar y enviar una gran cantidad de trabajos para diferentes publicaciones de América Latina, de manera muy específica primero para la Opinión Nacional de Caracas, y después para La Nación de Buenos Aires, Argentina.