José Martí: el simbolismo y la vigencia de su vida y obra

27 de enero de 2022

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Víctor Pérez-Galdós Ortíz

 

 

Con respecto al significado que le atribuía a su vida José Martí hizo referencia en varias oportunidades y de manera específica le expuso consideraciones al respecto a su querida madre Leonor Pérez, en la misiva que le dirigió el 15 de mayo de 1894 que mientras haya obra qué hacer un hombre entero no tiene derecho a reposar.

Y también le detalló: “Mi porvenir es como la luz del carbón blanco, que se quema él, para iluminar alrededor. Siento que jamás acabarán mis luchas.”

José Martí tuvo como principio esencial la sencillez para llevar adelante su existencia y no trabajó para recibir honores u otros reconocimientos, sino tan sólo por el hecho de servir a la causa de la independencia de su tierra natal del dominio colonial y lograr el establecimiento de una república que tuviera como ley primera el culto de los cubanos a la dignidad plena del hombre.

Más por la trascendencia de su ejemplo y por el gran caudal de principios expuestos por él en cartas, trabajos periodísticos, discursos, poemas, y otras obras, ha traspasado las fronteras de la época que le tocó vivir, para convertirse en fuente permanente de inspiración y de enseñanza para nuestro pueblo y para muchos hombres y mujeres en diferentes partes del mundo que lo han estudiado y reconocen en él un hombre de todos los tiempos.

Precisamente al valorar la trascendencia histórica de la vida de José Martí y como se ha convertido en fuente permanente de motivación y enseñanza el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro, señaló en el discurso que pronunció en La Demajagua, el 10 de octubre de 1968, en ocasión de cumplirse el centenario del inicio de la lucha por la independencia de Cuba: “Y debemos decir que nuestra patria cuenta con el privilegio de poder disponer de uno de los más ricos tesoros políticos, una de las más valiosas

fuentes de educación y de conocimientos políticos, en el pensamiento, en los escritos, en los libros, en los discursos y en toda la extraordinaria obra de José Martí. Y a los revolucionarios cubanos más que a nadie nos hace falta tanto cuanto sea posible ahondar en esas ideas, ahondar en ese manantial inagotable de sabiduría política, revolucionaria y humana.”

Nacido en La Habana el 28 de enero de 1853, hijo de padres españoles, en el transcurso de su breve pero fecunda existencia, vivió tan sólo 42 años, Martí evidenció estar motivado por sólidos principios.

En torno al valor que le atribuyese a los principios él manifestó en un trabajo titulado “El día de Juárez, en el periódico Patria, el 14 de julio de 1894: “…un principio justo, desde el fondo de una cueva, puede más que un ejército.”

Martí fue poeta, periodista, escritor, maestro, cónsul de países de América Latina en Nueva York, traductor, y más allá de todo ello fue siempre un gran patriota y un hombre que concibió desenvolver su vida en función de la felicidad y el bienestar de los seres humanos, y de sus compatriotas en forma muy específica. Evidenció un gran amor por Cuba y se sintió muy orgulloso por sentirse cubano.

Así él afirmó en el discurso pronunciado en la ciudad norteamericana de Tampa, ante un grupo de emigrados cubanos residentes allí, el 26 de noviembre de 1891: “De altar se ha de tomar a Cuba, para ofrendarle nuestra vida, y no de pedestal, para levantarnos sobre ella.”

Unos meses después en una carta fechada el 29 de junio de 1892 que envió

a un directivo de un Cuerpo de Consejo del Partido Revolucionario Cubano, aseguró: “…todo debe sacrificarlo a Cuba un patriota sincero –hasta la gloria de caer defendiéndola ante el enemigo.”

José Martí también se refirió a las características del pueblo cubano en otras intervenciones, así como en cartas y trabajos periodísticos.

Por ejemplo en un discurso pronunciado el 17 de febrero de 1892 en el Hardman Hall, Nueva York, planteó: “El cubano es capaz del amor, que hace perdurable la libertad.”

Y en un trabajo reflejado en el periódico “Patria”, el 7 de mayo de 1892, manifestó: “El cubano ama la gloria porque es capaz de ella: ama a los que pasean por el mundo la gloria de su patria.”

Martí, con una vigencia muy significativa, sigue paseando por el mundo la gloria de su patria y esto se pone de relieve en diversos eventos y actividades que se realizan para rendirle homenaje al más universal de los cubanos, acerca de quién igualmente el líder histórico de la Revolución Cubana, continuador de su obra, Fidel Castro llegó a enfatizar el 29 de enero del 2003 en la clausura de la Conferencia Internacional por el equilibro del mundo efectuada en La Habana: “-Más allá de Cuba, ¿qué recibió de él el mundo? Un ejemplo excepcional de creador y humanista digno de recordarse a lo largo de los siglos.

“¿Por quiénes y por qué? Por los mismos que hoy luchan y los que mañana lucharán por los mismos sueños y esperanzas de salvar al mundo, y porque quiso el azar que hoy la humanidad perciba sobre ella y tome conciencia de los riesgos que él previó y advirtió con su visión profunda y su genial talento.”