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Izquierda se consolida en Sri Lanka

21 de noviembre de 2024

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Quizás como nunca antes el pueblo esrilanqués se ha expresado tan amplia y profundamente como en los comicios celebrados este año en la llamada Perla del Índico, en los que no solo fue electo el primer presidente marxista de su historia, sino que, posteriormente, dio el respaldo a la coalición que encabezaba su Frente Popular de Liberación en una concurrida consulta legislativa que elevó de tres a 159 los curules que ocupará de los 225 escaños del nuevo Parlamento.

El primer presidente de izquierda en la historia de Sri Lanka, el marxista, Anura Kumara Dissanayake, ganó las elecciones legislativas por mayoría absoluta. La coalición ocupó el primer lugar en 21 de los 22 distritos del país con más de 5,68 millones de votos, cifra superior a la obtenida por el nuevo hombre fuerte del país durante su elección en septiembre.

Al votar en la capital, Colombo, el presidente se mostró muy confiado en sus posibilidades de victoria. “Creemos que esta elección es crucial y marcará un punto de inflexión para el país”, anticipó a la prensa. Todos los analistas habían pronosticado también una gran victoria del campo presidencial frente a adversarios divididos. “La oposición está muerta”, afirmó el analista Kusal Perera.

La magnitud de esta victoria otorga a la coalición una mayoría de dos tercios en el Parlamento, permitiéndole implementar cambios constitucionales y llevar a cabo reformas estructurales sin necesidad de negociar con la oposición.

Se define como un movimiento político compuesto por 21 grupos diferentes, incluyendo partidos políticos, grupos juveniles, organizaciones de mujeres, sindicatos y otras organizaciones de la sociedad civil.

Su plataforma se centra en varios puntos clave:

Lucha contra la corrupción: Dissanayake ha prometido priorizar el combate a la corrupción y la recuperación de activos públicos perdidos durante la crisis financiera del 2022.

Reforma económica: busca crear una economía que priorice la equidad junto con el crecimiento y el desarrollo sostenible. Esto incluye la renegociación de los términos del rescate de 2 900 millones de dólares otorgado por el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Justicia social: aboga por una sociedad donde las diferencias de clase, etnia, religión, idioma, casta, ubicación o género no impidan una vida plena y una participación igualitaria.

Sostenibilidad ambiental: está comprometido con la protección del medio ambiente a largo plazo y el uso sostenible de los recursos.

Transparencia y rendición de cuentas: El partido busca establecer una cultura política no corrupta, orientada al servicio, responsable y transparente.

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